Riesgo de contacto con toxina

El lago Ypacaraí presenta alto nivel de concentración de la toxina denominada microcistina, según los últimos análisis de la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa).

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Los indicadores llegan a 28,3 ug/l y la Organización Mundial de la Salud (OMS) establece como parámetro 1 ug/l.

El especialista en microbiología y técnico del Centro Multidisciplinario de Investigaciones Tecnológicas (Cemit), doctor Gilberto Antonio Benítez Rodas, señaló que es necesario advertir a la población sobre los peligros a la exposición de la toxina microcistina. Sostuvo que podría afectar gravemente la salud, en especial de las personas.

Fue tajante al afirmar que la toxina, presente en el lago Ypacaraí, puede afectar la salud del ser humano y de todos los organismos vivos que entran en contacto con el agua. El efecto depende de la concentración y el tiempo de exposición en el agua, refirió.

Es muy difícil establecer una concentración letal para el ser humano, porque depende del tiempo de exposición, de las características del individuo, y otros. Sin embargo, en procesos de diálisis que han utilizado agua contaminada con cianotoxinas, han ocasionado la muerte de los pacientes en el Brasil, dijo el especialista.

Recordó que en 2011 se reportó en Argentina (Salto Grande Dam) el caso de un joven que practicando deporte acuático, estuvo expuesto a 48,6 ug/l de microcistina-LR y que cuatro horas después sufrió náuseas, dolor abdominal y fiebre. Luego de tres días presentó problemas respiratorios por lo que tuvo que ser internado en un hospital.

Subrayó que por todo ello es necesario advertir a la población sobre los peligros, debido a que la toxina entra en el cuerpo humano a través de la boca, fosas nasales, ojos, heridas u otros.

Destacó que es muy importante evitar la exposición, no entrando en lugares de recreación donde el agua presente un color verdoso.

La microcistina es un tipo de cianotoxina o toxina producida por la especie Microcystis aeruginosa en aguas superficiales, explicó el Dr. Gilberto Benítez. La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que la concentración máxima que debe haber en el agua para consumo humano es de 1 ug/L de microcistina LR.

Según el último análisis de la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa), la concentración de la toxina microcistina en el lago Ypacaraí es de 28,38 ug/L, valor considerado muy alto. El doctor Benítez recomendó realizar análisis periódicos para verificar el aumento o disminución de la microcistina para protección de las personas que utilizan el espejo de agua.

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