Exenfermera de soldados heridos festejó 105 años

La exenfermera durante la Guerra del Chaco (1932-1935) Sílfide Meyer Vda. de Espínola festejó sus 105 años en la ciudad de Paraguarí. A pesar de su avanzada edad, recordó que cuando se produjo la contienda contra Bolivia se encargó de cuidar a los heridos que eran trasla- dados desde el “infierno verde”.

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PARAGUARÍ (Emilce Ramírez, de nuestra redacción regional). Doña Sílfide Meyer Vda. de Espínola recibió el 22 de febrero una serenata de los músicos del Comando de Artillería de Paraguarí, que llegaron a su casa ubicada en el barrio Submarino.

Como todos los años el cumpleaños de la longeva mujer se constituye en una fiesta en el citado barrio y los vecinos preparan la celebración con regalos, tortas y bocaditos.

Durante el festejo por sus 105 años hizo una pausa para conversar con nosotros y, a pesar de su avanzada edad, recordó que cuando se produjo la contienda le tocó servir a la patria como voluntaria de la Cruz Roja en el entonces puesto de salud de esta capital departamental.

Comentó que los soldados del Chaco llegaban gravemente heridos, otros mutilados. Las curaciones y los tratamientos estaban a cargo de las enfermeras voluntarias, recordó.

Después trabajó en el Archivo en el Colegio Nacional de Paraguarí y también en el Instituto de Formación Docente de esta ciudad. Es socia de la Asociación de Jubiladas de Paraguarí.

La abuela se casó muy joven con Teófilo Espínola (+). Tuvieron una sola hija, Gladys María Espínola Meyer, quien falleció hace años en un accidente ferroviario en el Chaco, cuando tenía 27 años de edad. Desde hace más de 37 años vive en su casa bajo el cuidado de Martina Torres.

La abuela calificó a la mujer paraguaya como la más valiente, la más gloriosa, parafraseando al papa Francisco. Agregó que la caridad es otro valor que identifica a la mujer paraguaya.

La longeva mujer se encuentra lúcida y dijo sentirse bendecida por llegar a los 105 años con salud. Cree que su buena alimentación la mantiene fuerte y con vida.

Leche de cabra, alimentos sanos en fibra y frutas de estación forman parte de su alimentación. Toma té a la mañana y come una fruta a la media mañana. Por la tarde no le debe faltar el tradicional chipá ni la sopa de verduras a la hora de la cena.

En un momento de la entrevista también rememoró que su abuelo, Guillermo Meyer, conformó la delegación que tuvo a su cargo la construcción de las diferentes estaciones ferroviarias en nuestro país.

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