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El hombre recibió cuatro impactos de bala. El asesino le disparó con el propio revólver de la víctima fatal, de quien había sustraído el arma luego de una discusión, según un testigo.
La víctima fue el ciudadano que se dedicaba a la reparación de vehículos Blas Isidoro Ojeda Cubas (45). Este llegó a su casa aproximadamente a las 02:30 de ayer en una camioneta, se encontraba en compañía de su pareja Alice Paniagua Benítez (27 años) y su cuñado D.P. B (de 16 años).
La citada mujer y el menor descendieron del vehículo e ingresaron a la vivienda, mientras que Ojeda Cubas se quedó como para bajar todas sus pertenencias. En ese momento se le acercó una persona de sexo masculino y en instantes se produjo entre ellos una discusión.
El visitante se abalanzó sobre el mecánico, sacándole el arma de fuego que portaba en la cintura, con el cual efectuó los disparos que alcanzaron a la víctima.
El testigo señaló a la policía que el victimario se apoderó de una cartera colgante que pertenecía al mecánico y que presumiblemente contenía en su interior dinero en efectivo y documentos varios.
El criminal también llevó el arma de fuego de su víctima y huyó a pie del lugar.
La esposa del trabajador también observó todo lo que acontecía frente a su domicilio, pero nada pudo hacer debido a la rapidez en que sucedieron los acontecimientos.