/arc-anglerfish-arc2-prod-abccolor.s3.amazonaws.com/public/4G7DIRC2GNHZZLBCRIHTBWBQQI.jpg)
Cargando...
El juez penal de Garantías de Villa Hayes, Víctor Hugo Ronzewsky Maziuk, convocó a las partes para las 8:00.
El principal acusado por lesión de confianza es el diputado cartista Óscar Venancio Núñez, alias Ñoño, que es el hermano de Basilio “Bachi”, ministro asesor político del presidente Horacio Cartes.
La última vez que se intentó hacer la preliminar fue hace siete meses, en mayo de este año, pero se recusó al juez Ronzewsky hasta en la Corte Suprema para dilatar más la audiencia.
El fiscal de Delitos Económicos Martín Cabrera acusó al parlamentario que busca su rekutu para blindarse con los fueros el 11 de setiembre de 2015 y desde ese entonces Núñez ha chicaneado el desarrollo de la preliminar.
La acusación penal revela que durante la administración de Núñez, entre 2008-2013, se desviaron G. 30.000 millones mediante la expedición de 900 cheques que fueron cobrados en el Banco Nacional de Fomento (BNF) y no cuentan con documentos respaldatorios.
Otras 40 personas, en su mayoría funcionarios de la gobernación y parientes del legislador, estuvieron incluidas en el proceso penal.
Estas personas se allanaron a salidas alternativas mediante la aceptación de los cargos.
Muchos de los involucrados cobraron cheques de la Gobernación y admitieron que entregaban los montos al propio Óscar Núñez.
El político también fue acusado en otro proceso en el que la lesión al patrimonio de la entidad departamental fue de unos G. 905 millones.
Aquí se desviaron fondos destinados a la ayuda social para comunidades indígenas, que se encontraban en emergencia hídrica. De hecho, fue en esa causa que saltó el perjuicio de más de G. 30.000 millones.
El parlamentario también fue incluido en el proceso por supuestas irregularidades cometidas en el programa “Una computadora por niño” y el daño fue de G. 1.050 millones.
Ni un solo documento
La acusación contra el exgobernador de Presidente Hayes (2008-2013) y actual diputado cartista, Óscar Venancio Núñez, revela que no existe ni un solo documento que justifique el destino de los G. 30.000 millones cobrados en cheques del Banco Nacional de Fomento (BNF).
El político siempre dijo que los documentos existían y que iba a presentarlos, pero esto nunca ocurrió, por lo que el Ministerio Público abrió el proceso por lesión de confianza.