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Ayer los abogados Carlos Alberto Bogado y Jorge Zárate se presentaron ante el juzgado, pero manifestaron su oposición a la realización de la audiencia.
Los letrados, defensores del único acusado –que también estuvo en tribunales con sus padres–, alegan por un lado que no estaba firme la competencia de la jueza, pues la resolución de la cámara que rechazó la recusación de otra defensa fue apelada. Por otro lado, alegan que no han accedido aún al video de las sesiones del tratamiento psicológico de la víctima y por ello no participarán en la audiencia.
La actuaria procedió a disponer la suspensión de la audiencia, decisión que motivó la reprobación de la jueza, puesto que la misma no ha sido notificada aún de la apelación y, por lo tanto, sigue firme su intervención.
Ínterin se definía si se realizaba o no la audiencia –posteriormente postergada para el 18 de diciembre– la abogada Ada Carolina Ferreira desde el balcón cuestionó a la jueza por la demora en acceder a su expediente.
En atención a que la letrada no participaría de la diligencia, puesto que su cliente tiene sobreseimiento, la jueza exigió su retiro y, ante su negativa, llamó a la Policía para el efecto. Es la segunda vez que la jueza recurre a la Policía para alejar a la letrada del juzgado, pues el día anterior hizo lo mismo. Coronel labró acta de lo ocurrido y remitió un informe al Consejo de Superintendencia de la Corte.