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CARMELO PERALTA, Dpto. de Alto Paraguay (Carlos Almirón, corresponsal).- La embarcación zozobró el pasado miércoles 24, alrededor de las 17:00, como consecuencia de una fuerte tormenta. El hundimiento del navío ocurrió a unos 50 metros de la ribera, cuando el navío fue literalmente arrasado por un viento huracanado.
El barco llevaba en su interior a 26 personas, de las cuales pudieron salvarse 12. Hasta el cierre de esta edición pudieron ser sacados del agua 11 cuerpos, mientras continuaban desaparecidas tres personas, entre ellas el capitán y dueño de la embarcación, Luis Penayo.
Ayer nuevamente se vivieron momentos de tensión en la zona, pues la angustia y desesperación se apoderaron de los familiares y amigos de quienes aún no fueron encontrados, tales como el citado capitán y los brasileños Benedicto Aparecido da Silva y Roberto Villona.
Bonifacio Penayo, hermano del capitán desaparecido, dijo que él y sus parientes se sienten abandonados de parte de las autoridades nacionales, alegando que desde el mediodía de ayer los buzos de la Armada Nacional dejaron la búsqueda de los desaparecidos .
Sin embargo, esa información fue desmentida por el capitán de fragata Amílcar Vera. Este alegó que no abandonaron los trabajos, solo que los buzos ya no se tiraron al agua ayer debido a que estaba en peligro sus propias vidas.
El militar refirió que la embarcación, que se encuentra a unos 24 metros de profundidad, fue movida por la fuerza de la correntada, quedando en la posición cabeza para abajo, con el riesgo de caer a un costado y eventualmente sobre los buzos.
Indicó que en la mañana de hoy continuarán trabajando para tratar de sacar los cuerpos en caso de que aún estén dentro de la nave.
Mientras tanto, familiares y amigos del capitán desaparecido realizaron la tarea de unir ganchos de hierro a cabos de acero, para luego desde deslizadoras enganchar por el barco que se encuentra en el fondo del río.
Dos de esas cuerdas pudieron ser enganchadas a la embarcación, y en la mañana de hoy tratarán, con la ayuda de un barco grúa que se encuentra en la orilla, de mover a “Sueños del Pantanal”.
La idea es intentar acercar la nave más hacia la costa y que de nuevo recupere su posición normal, para que los buzos puedan volver a realizar su trabajo dentro de la embarcación, donde se cree siguen atrapadas las 3 víctimas restantes.
Entre el domingo y ayer la búsqueda resultó estéril, ya que no se logró hallar ningún otro cuerpo; sin embargo, desde que sucedió la tragedia ya se recuperaron 11 cuerpos, 9 de ellos pertenecientes a turistas brasileños y 2 compatriotas que trabajaban en la embarcación.
El barco hacía un recorrido de 10 días por el pantanal.