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La semana pasada, cientos de taxis pertenecientes al APTA cerraron en dos ocasiones la avenida Mcal. López, afectando gravemente el tránsito como una medida de presión ante la Municipalidad de Asunción. Pedían que la Comuna suspenda la habilitación de la parada Nº 79, perteneciente a la Cooperativa 11 de Noviembre, argumentando que “ya existían demasiadas paradas”.
El intendente capitalino Mario Ferreiro conformó una mesa de diálogo entre todos los sectores. Ayer Arístides Morales, presidente de APTA, presentó en una reunión de la mesa la propuesta de resolver el conflicto con la condición de que se les ceda diez lugares en la parada Nº 79.
Otra propuesta fue que se le habilitara una parada más al APTA, pese a que ya la mayoría de las ubicadas en Asunción pertenecen a esta asociación.
En un principio, también Morales se mostró preocupado por supuestas malas condiciones de trabajo en la parada Nº 79 y dijo que no se hicieron los estudios técnicos necesarios. No obstante, al ser consultado sobre si estaría de acuerdo con su habilitación de regularizarse los problemas, este respondió negativamente.
El presidente de la Cooperativa 11 de Noviembre, Juan Galeano, dijo que la parada Nº 79 no es negociable y no cederán sus espacios. “Es un doble discurso el de ellos porque dicen ‘no, no a la parada 79’, sin embargo, para buscar una solución piden espacio en la misma”, criticó. Por otro lado, expresó que inclusive recibió una amenaza de muerte de un miembro del APTA.
El próximo martes se realizará otra reunión en la Comuna y se labrará acta para llegar definitivamente a un acuerdo. “Acá hay familias y gente que ya se endeudaron para adquirir vehículos”, indicó, en referencia a muchos trabajadores que ahora dependen de la apertura de la parada.