Jóvenes olímpicos de matemáticas abogan por igualdad de oportunidades

Nicolás Riera (17), estudiante del Colegio Internacional, miembro del equipo nacional que ganó una medalla de bronce en el Mundial de Matemáticas y una de plata en la Olimpiada Iberoamericana señala que sin el apoyo de Itaipú las desigualdades no cesarán.

“Este es un programa que Itaipú debería apoyar siempre porque es una buena inversión. Se han visto resultados muy positivos en estos cuatro años de convenio. Sin el apoyo de Itaipú, OMAPA no puede llegar a todos los colegios y todo se limitará solo a los alumnos que tienen posibilidades económicas para pagar su entrenamiento, lo que fomenta las desigualdades de oportunidades”.

Riera también apuntó que gracias a este programa los estudiantes pueden acceder a las mejores universidades del mundo. “La matemática es una herramienta que nos acerca a las mejores universidades del mundo. Tenemos a jóvenes que se formaron en OMAPA y ahora estudian en el Instituto Tecnológico de Massachusetts, Stanford y Columbia, por decir algunas. Además, está comprobado que los alumnos que participan en las olimpiadas de matemáticas mejoran su nivel, al igual que el de los compañeros que no participan”.

Marcos Rubén Zárate Gamarra (16), también del colegio Internacional y un olímpico de bronce, destaca que muchos estudiantes ya no pudieron participar de los cursos de preparación para las Olimpiadas 2015.

“En el próximo Mundial de Matemáticas, que se realizará en Tailandia, ya no podrán participar los seis mejores del país. La representación de Paraguay se limitará a los seis mejores que puedan pagar sus pasajes. Todos deberían tener las mismas oportunidades”, dijo.

Gerardo Fisch (16) del Colegio Técnico Nacional apuntó que los que se unen a este entrenamiento lo hacen por elección propia. “Estudiamos porque nos gusta y muchos otros del interior también lo hacen así, pero sin apoyo será más difícil”.

Alexander Jesús Olmedo (13) es el mejor en matemáticas del Departamento de Caaguazú, junto con otros tres compañeros. Por iniciativa propia, gestionó una beca en OMAPA para participar del último curso de verano y pese a las dificultades económicas que representó para su familia cubrir el viaje hasta Asunción y su estadía, su padre lo apoyó para estudiar ocho horas diarias de matemáticas durante cinco días. “Pienso que el Gobierno e Itaipú deben seguir apoyando este programa impulsado por OMAPA, porque ayuda a mejorar la educación en Paraguay. A mí me resulta muy fácil y divertido resolver problemas de matemáticas y cada vez que los resuelvo me siento muy bien. En Itaipú también deberían resolver sus problemas con las matemáticas, que al parecer es lo que les impide seguir apoyando este programa. Si los resuelven van a ver lo bien que se van a sentir”, finalizó.