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El “interés” que demuestran los “zorros” luqueños en ejecutar controles vehiculares en caminos intermunicipales es muy llamativo y muy cuestionado por los conductores.
En tanto, el tránsito en el microcentro de la ciudad cada vez se vuelve más caótico y desorganizado. Principalmente los fines de semanas se repite la aglomeración de vehículos por la falta de ordenamiento del tránsito, que vuelve insoportable circular por la ciudad.
Los agentes de la PMT deben cumplir su función de ordenar el tránsito dentro de la ciudad y no actuar como “zorros” en las periferias, pero lo hacen movidos por el afán de recaudar.
El jefe de Tránsito de la Municipalidad de Luque, inspector Alan Ramírez, estaba dirigiendo un control ilegal en el ramal denominado De Las Residentas, que conecta Luque con Areguá, a la altura del barrio 3 de Mayo. El agente de Tránsito no contaba con orden de trabajo operativo para el efecto.
Al ser requerido, como un “loro” repetía que el director de Tránsito, Eladio Gómez Verlangieri, le ordenó hacer un “estricto” control en el tramo Luque-Areguá.
Llamativamente, los “zorros” en toda una mañana de control no aplicaron ni una sola multa ni se incautaron de una sola motocicleta. Tal vez eso explique por qué tanto “interés” por ejecutar el operativo en el tramo que está a cargo de la Patrulla Caminera.
Mientras los agentes de la Municipalidad realizan sus operativos en los caminos intermunicipales, en la ciudad los conductores estacionan sus vehículos en sitios prohibidos y en doble fila, generando caos. Los motociclistas circulan sin cascos protectores, transportan a niños, se adelantan por la derecha, no respetan las normas de tránsito ni los semáforos y se creen los dueños de las calles.
arnaldo.espinola@abc.com.py