Complicidad de 23 senadores impide desafuero de Bogado

Un total de 23 senadores “cómplices”, integrados por 12 colorados, nueve liberales y los dos de Unace, impidieron el desafuero del legislador colorado Víctor Bogado y le tendieron un manto de impunidad hasta el 2018, pese a una contundente imputación fiscal. Se necesitaban 30 votos para retirar los fueros del legislador, pero solo se lograron 22.

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Tras un debate de casi dos horas y media, el Senado no logró reunir los 30 votos para desaforar a Bogado y someterle a la justicia ordinaria sobre supuestos hechos punibles de cobro indebido de honorarios en calidad de cómplice de la niñera Gabriela Quintana Venialgo y por estafa en calidad de autor.

A 22 llegaron los votos por el desafuero, con la adhesión a último momento de los senadores Blanca Lila Mignarro (PLRA) y Adolfo Ferreiro (Avanza País), quien solicitó inicialmente una exoneración (modalidad que no está prevista en el reglamento de la Cámara).

Hubo dos posturas bien diferenciadas en la sesión entre quienes estaban a favor y en contra del desafuero de Bogado. Pero solo tres (Enrique Bacchetta y los liberales Julio C. Franco y Luis A. Wagner) de los 23 que estaban a favor del imputado legislador intentaron desacreditar el trabajo de la Fiscalía de Delitos Económicos.

El senador Bacchetta fue el único colorado que defendió a Bogado y hasta actuó como su abogado personal. Argumentó dos cosas: 1. Que los fiscales imputaron al senador solamente “para darle el gusto a la prensa” y 2. Que Bogado no cometió el supuesto hecho punible de doble cobro indebido de honorarios en calidad de cómplice. Añadió que en realidad se le hubiese imputado solo a Gabriela Quintana por “doble remuneración” (en Diputados y en Itaipú) que con la devolución del dinero se le exoneraba de culpa.

Por su parte, Franco indicó que no correspondía la imputación porque “todos pedimos alguna vez el nombramiento de alguien. Y si eso es delito...”, se preguntó, justificando su posición.

Petta refuta

El senador Eduardo Petta (PEN) le refutó punto por punto a Bacchetta, con la proyección de documentos en powerpoint. Recordó a los legisladores por qué la imputación es correcta: 1. Gabriela Quintana era funcionaria de Diputados desde el 2008 y asignada a la oficina del entonces diputado Bogado cuando el 4 de marzo de 2013 la niñera consigue ser contratada en Itaipú bajo la falsa figura de “exclusividad laboral”.

2. Para que Gabriela Quintana cobre doble salario, Bogado pide por nota al director general paraguayo de Itaipú, Franklin Boccia, el 5 de marzo de 2013 el comisionamiento a la Cámara Baja, hecho que se logró.

Entonces, Diputados le pagaba un salario e Itaipú también, con lo cual percibía en los papeles una remuneración de G. 17 millones mensuales.

Los liberales Miguel A. Saguier y Carlos Amarilla; Juan C. Galaverna (ANR), Hugo Richer (FG) y Arnaldo Guizzio (PDP) insistieron en que el Senado solo tiene que estudiar la forma y los méritos de la imputación y, por tanto, correspondía el desafuero para que Bogado se someta a la justicia. Esto solo será posible si Bogado no es reelecto en el 2018.

Wagner contra Galaverna

El senador liberal Luis A. Wagner recordó ayer en plena sesión que su colega colorado Juan C. Galaverna recibía víveres (motivo por el cual Luis María Argaña lo bautizó como “el ladrón de galletas”) y que robó las internas de la ANR. Agregó que Galaverna no puede hablar de legalidad por los dos antecedentes citados.

El enojo de Wagner se produjo porque Calé exhortó a senadores a votar por el desafuero de Bogado y a ceñirse estrictamente a la ley que manda analizar la forma y el mérito de la imputación.

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