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Hugo Velázquez dijo que los fiscales acusadores designados por el pleno, los colorados Ramón Romero Roa, Bernardo Villalba y Óscar Tuma, el liberal Eusebio Alvarenga y la independiente Olga Ferreira, presentaron ayer, ante la secretaría, los libelos acusatorios que hoy serán remitidos al Senado.
El legislador indicó que, en principio, se habló de incorporar más pruebas y acusaciones contra el contralor y la subcontralora, ya que habían recibido nueva documentación. Para el efecto se aprobaría esta incorporación en la plenaria del pasado miércoles.
Sin embargo, esto habría sido descartado para no modificar lo que ya fue aprobado la semana pasada.
Una vez que el Senado les dé entrada oficial a los libelos acusatorios, lo cual ocurriría en la sesión ordinaria del próximo jueves, la plenaria de esa cámara decidirá si lo remite a la Comisión de Asuntos Constitucionales para un dictamen o si decide un tratamiento sobre tablas.
De acuerdo a los antecedentes de juicios políticos realizados anteriormente, el Senado debe aprobar un reglamento especial para este caso y definir las fechas en las que llevarán a cabo las audiencias.
Los diputados designados como fiscales deberán acudir ante el pleno para fundamentar su acusación y, asimismo, los acusados, contralor y subcontralora, tendrán la oportunidad de ejercer su defensa, en forma personal o a través de uno o más abogados que designen.
Finalmente, los senadores deberán votar en forma nominal a favor o en contra de la destitución de los funcionarios. Para confirmar la destitución son necesarios dos tercios de los componentes de los integrantes, es decir, 30 votos.
Después de las internas
De acuerdo a las versiones que se manejan en el ambiente legislativo, el juicio político al contralor Velázquez y la subcontralora Torreblanca recién se iniciaría luego de las elecciones internas de los partidos del 26 de julio próximo. El motivo es que el ambiente electoralista instalado en el Congreso motiva muchas dudas sobre el sentido de los votos. Inclusive se podría retrasar por más de tres semanas, hasta tanto se aclaren las nuevas relaciones de fuerzas entre los sectores políticos. El pasado martes, el mismo Hugo Velázquez dijo que la subcontralora Torreblanca, de origen liberal, estaba operando con algunos senadores para evitar su destitución y quedarse hasta el fin de su mandato, en diciembre.