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El senador Alegre indicó que una de las cuestiones a analizar es si el proceso de inscripción en el padrón de compatriotas tanto los que viven en el país como los que residen en el exterior se debe hacer con los mecanismos tradicionales. Apuntó que se debería ver la posibilidad de utilizar métodos más modernos, que al mismo tiempo economizan.
Indicó que es probable que toda la extraordinaria inversión para la contratación de gran número de inscriptores sea innecesaria.
Adelantó que una vez que estudien el documento, plantearán las objeciones que consideren necesarias.
En tanto, el senador Pereira dijo que en nuestro país se requieren muchos puestos de trabajo y la Justicia Electoral se convierte en un punto de ocupación disfrazada, aprovechándose de la situación de la gente en tiempo electoral.
Indicó que es evidente que el gran aumento presupuestario aprobado para la Justicia Electoral debe ser reconsiderado y aprobarse solamente lo que es realmente necesario para el funcionamiento correcto de esa institución, pero no para mantener operadores políticos.
En tanto, el senador Monges dijo también que se debe analizar rigurosamente lo aprobado y descartar aquellos gastos que no sean absolutamente necesarios. Indicó que es partidario de que se busquen alternativas en cuanto a las contrataciones y, en el caso de los inscriptores para el exterior, ver la posibilidad de emplear a personas que residan en los países afectados.
Habría un doble discurso
A pesar de la promesa de austeridad y mayor control presupuestario que lanza la mayoría de los senadores consultados, varios de ellos consideran que no será fácil rechazar la ampliación presupuestaria aprobada para el TSJE, dado que esto significaría dejar sin “rubros” a sus operadores políticos. En ese sentido, se espera una gran presión de los diputados de los distintos partidos, especialmente de la ANR, el PLRA y Unace.
Indicó que es probable que toda la extraordinaria inversión para la contratación de gran número de inscriptores sea innecesaria.
Adelantó que una vez que estudien el documento, plantearán las objeciones que consideren necesarias.
En tanto, el senador Pereira dijo que en nuestro país se requieren muchos puestos de trabajo y la Justicia Electoral se convierte en un punto de ocupación disfrazada, aprovechándose de la situación de la gente en tiempo electoral.
Indicó que es evidente que el gran aumento presupuestario aprobado para la Justicia Electoral debe ser reconsiderado y aprobarse solamente lo que es realmente necesario para el funcionamiento correcto de esa institución, pero no para mantener operadores políticos.
En tanto, el senador Monges dijo también que se debe analizar rigurosamente lo aprobado y descartar aquellos gastos que no sean absolutamente necesarios. Indicó que es partidario de que se busquen alternativas en cuanto a las contrataciones y, en el caso de los inscriptores para el exterior, ver la posibilidad de emplear a personas que residan en los países afectados.
Habría un doble discurso
A pesar de la promesa de austeridad y mayor control presupuestario que lanza la mayoría de los senadores consultados, varios de ellos consideran que no será fácil rechazar la ampliación presupuestaria aprobada para el TSJE, dado que esto significaría dejar sin “rubros” a sus operadores políticos. En ese sentido, se espera una gran presión de los diputados de los distintos partidos, especialmente de la ANR, el PLRA y Unace.