Proliferan camalotes en subembalse del Mbói Ka’ê y Santa María, en Encarnación

Uno de estos operadores sería Ricardo Martínez, quien fue candidato por el Progresismo Colorado (Lista 5, nicanorista) para el cargo de concejal departamental de Itapúa. Un hijo de este, Richard Marcos Alexander Martínez Villalba (23), fue beneficiado con la referida OC, que lleva el número de orden 68.500, y las firmas del director de la EBY, Duarte Frutos, y del subjefe del departamento financiero de la EBY, Luis Fretes Escario.

El monto del contrato es por G. 154.605.495 y refiere, sin más precisiones, que el contratista debe realizar el servicio de recolección de residuos urbanos, restos de biomasa y limpieza de talud, en el tratamiento costero de la ciudad de Encarnación.

La tarea a realizar, según confirmaron fuentes en la entidad, es la limpieza de camalotes en la microcuenca del arroyo Mbói Ka’ê, entre los barrios Santa María y San Pedro. La OC fue otorgada el pasado 9 de enero, pero a la fecha no se realizó ninguna tarea, tal como se puede observar con la acumulación de camalotes que prácticamente cubre todo el curso de agua, a lo que se suma la proliferación de yuyales en los espacios públicos del barrio San Pedro, como puede apreciarse en las gráficas.

¿Qué son las OC?

Las llamadas “OC” son contrataciones para trabajos puntuales, que por lo general son manejados “como un botín de guerra”, de acuerdo a nuestra investigación. En la práctica, esta figura se emplea para distribuir discrecionalmente dinero público –bajo apariencia legal– entre operadores políticos y amigos del poder, a través de supuestos servicios ofrecidos por firmas de fantasía o prestanombres.

“El blanco soy yo”

Por su parte, el dirigente de afectados de la EBY, Ricardo Martínez, aseguró que los cuestionamientos a su contrato con la entidad viene de “gente envidiosa” que “quedó fuera” y no recibió ningún cargo o beneficio en la entidad binacional EBY, tras las últimas elecciones generales. El contrato de trabajo, que salió a nombre de mi hijo, es legal, agregó, que tiene cinco meses para cumplir. “Esto equivale a 30 millones por mes, que debo ejecutar en cinco meses”, dijo, y acotó que los trabajos ya fueron iniciados incluso antes de recibir el anticipo del 40%. Martínez manifestó también que hace 24 años es dirigente social, y que durante todo este tiempo recibió órdenes de trabajo de la EBY y que como él existen muchos, con montos incluso mucho más altos. El dirigente admitió, además, que tiene deudas pendientes y un llamado de acreedores, razón por la cual la OC salió a nombre de su hijo y no al suyo.