Aplican diez años a policía que mató a comerciante

El imputado y detenido Fabián Sebastián Verón es responsable del delito de homicidio doloso porque fue autor del asesinato del comerciante Amado Benegas, de 28 años de edad.

El imputado es responsable del delito de homicidio doloso y corresponde aplicarle una pena de 10 años de cárcel, manifestó en Tribunal de Sentencia en el fallo dado a conocer la semana pasada.

De esa forma finalizó el juicio seguido al suboficial de policía que mató a balazos al joven comerciante, cuya muerte causó indignación y motivó la reacción de vecinos que intentaron linchar al uniformado.

Al dictar la sentencia, el tribunal consideró los hechos, según los cuales el ahora condenado había disparado contra Benegas. Según los antecedentes, al final de la jornada el domingo 20 de mayo del 2012, el agente policial regresó en moto a su casa y cerca del Mercado 4 de la capital tuvo un roce con otro motociclista.

Tras llegar a su vivienda, el policía recibió la visita del joven con cuya motocicleta se registró el roce. Se trataba del comerciante Amado Benegas, quien formuló al policía un reclamo por el roce, a lo que el agente respondió a los gritos, tras lo cual se produjo un forcejeo.

Tras los gritos y en medio del forcejeo, el policía extrajo su pistola y realizó dos disparos contra el joven comerciante, quien minutos después falleció.

El episodio fue presenciado por varios testigos que más tarde trataron de linchar al agente policial.

Tras ser detenido, el policía dijo que fue víctima de un ataque y más tarde el fiscal penal Juan de Rosa Avalos impulsó un proceso que terminó en juicio oral con la condena del imputado.

“El Tribunal llega a la convicción de que el acusado ha obrado con plena capacidad de autodeterminarse conforme al conocimiento de la antijuricidad del hecho a través del estudio sicológico realizado al acusado, el cual demuestra que el acusado es capaz de conocer la antijuricidad del hecho que se le atribuye”, dijo el tribunal de sentencia en su fallo.

Agrega que el acusado “no padece de desarrollo físico incompleto o retardo ni grave perturbación de la conciencia, ni se denota que el mismo se encontró bajo un estado de suficiente desesperación, miedo, furia, entre otras circunstancias que lo condujeron a realizar los hechos demostrados”. La conducta del acusado Fabián Sebastián Verón reúne todos los requisitos para ser merecedora de la pena de diez años de cárcel, finalizó el tribunal. La acusación fue del fiscal Juan de Rosa Ávalos.

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