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Lynch ofreció esta tarde una conferencia de prensa, en la cual oficializó la detención de Napout y Alfredo Hawit, ambos señalados como parte de esta red que “institucionalizó la corrupción para sus propios beneficios”, según describió. La fiscala dijo que estas personas “han secuestrado al deporte más popular del mundo”.
Al mismo tiempo, anunció que existen nuevos cargos y 16 nuevos involucrados, todos con puestos ejecutivos de poderosas organizaciones del fútbol. Anunció también que ocho de ellos han dicho que aceptarán su culpabilidad.
Todas estas personas habrían formado parte de esta red desde el año 1991 hasta el presente, indicó. “Dos generaciones de funcionarios (de estas organizaciones) han trabajado no para la mejora del deporte, sino para sus propios beneficios”, dijo Lynch.
Entre los ocho acusados que se declararon culpables, figura el exvicepresidente de la Concacaf Jeffrey Webb, los expresidentes de federaciones Sergio Jadue (Chile) y Luis Bedoya (Colombia), los empresarios Alejandro Burzaco (Argentina) y José Margulies (Brasil), según leyó el fiscal Robert Capers, tras la intervención de Lynch.
El acta de acusación actual incluye unos 92 cargos, entre los que figura crimen organizado, fraude electrónico y conspiración de lavado de dinero, entre otros delitos, que formaron parte de un plan de 24 años para enriquecerse a través de la corrupción del fútbol internacional, detalla el comunicado del Departamento de Justicia de los Estados Unidos.
En total, serían ahora unos 27 los imputados de acuerdo a la acusación formal, señalados como partícipes de una serie de planes diseñados para solicitar y recibir más de $200 millones en sobornos y comisiones ilegales.
“Los cargos revelados hoy envían un mensaje claro a los que corrompen un deporte amado por millones, para satisfacer su propia codicia. Estamos decididos a poner fin a los sobornos y la corrupción en el fútbol internacional y para hacer espacio para una nueva era de la integridad y la reforma”, dijo por su parte el fiscal Capers.
Esta madrugada, las autoridades suizas en Zúrich arrestaron a dos de los acusados en la acusación formal -Hawit y Napout- a petición de los Estados Unidos. Fue durante la intervención en el hotel Baur au Lac. En esta misma ciudad, pero en el mes de mayo, fueron detenidos otros miembros del órgano rector del fútbol internacional, también involucrados en el escándalo de corrupción.
El 25 de noviembre la justicia de Estados Unidos labró orden de captura contra Napout, y la orden de allanamiento el hotel donde detuvieron al dirigente deportivo paraguayo ya había sido firmada el pasado 29 de noviembre. Todo apunta a que manejaban el movimiento de Napout.