“Arrastran a familias y niños”

Servín dijo que los que llegan frente al local del Indi en Asunción cada tanto “son los mismos de siempre” y que representan a solo el 1% del total de los indígenas del país, que son cerca de 120.000. “Las razones (por las que se acercan a la capital) son varias: conflictos internos, grupos de familia sin liderazgos propios, o con la estrategia de querer conseguir algo acá. Terminan los víveres y vuelven 15 días después las mismas personas con el mismo discurso”, se defendió.

El “procedimiento”, según Servín, consiste en pedir a la intendencia de sus ciudades un bus para ir hasta la gobernación y de allí a Asunción en otro colectivo. “Ellos ponen transporte y luego les envían acá, es una práctica de los últimos meses”, se quejó al ser consultado sobre las familias que amanecieron frente al Indi esta mañana, luego de pasar una noche en el frío y la lluvia.

El titular del instituto dijo que “son las mismas familias de siempre” las que terminan apostándose frente al edificio del Indi y que luego salen a mendigar en las calles. Uno de los líderes “promotores” de esta forma de vida es Tomás Domínguez, dijo Servín. “Este señor tiene casa y energía eléctrica, pero igual viene a pedir”, agregó. Aseguró que ya se hizo una denuncia en su contra ante el Ministerio Público.

Tras dicha denuncia, el Juzgado de la Niñez y la Adolescencia resolvió que al menos los menores sean retirados de la zona y que sean asistidos en un albergue. El responsable del cumplimiento de esta orden judicial es la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), dijo el titular del Indi. “Una jueza le obligó a la SEN a asistirlos en un albergue y dice el lugar, pero por qué no sucede eso, no sé”, indicó.

“Tenemos un montón de otros quebrantos, pero este problema no deja de ser importante. Ellos se resisten y tienen una práctica de estar en la calle y venir cada 15 días”, aseguró Servín. Instó a la ciudadanía a que deje de dar monedas y lleve ropas u otro tipo de insumos a estos grupos, porque finalmente solo se fomenta la “mendicidad”. Agregó que los adultos son los responsables y que es el Ministerio Público es el que tiene que actuar.

Lo cierto es que anoche, un grupo de niños, mujeres embarazadas, ancianos y hombres, durmieron en la húmeda y fría vereda del Indi, protegidos solo por plásticos. Varios ciudadanos criticaron el hecho, teniendo en cuenta que hace tan solo días la cultura nativa era motivo de celebración en las presentaciones artísticas que se hicieron en los diferentes eventos de los que participó el papa Francisco.