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“Como bancada nos hemos expedido y solicitamos explicaciones de por qué ese dinero de G. 10.600 que se paga, sólo G. 600 queda para el municipio y el resto para Opaci”, señaló el concejal Carlos Arregui, quien con su par del Partido Democrático Progresista (PDP) solicitaron la suspensión de la Inspección Técnica Vehicular (ITV).
La Opaci cobra G. 10.000 a los contribuyentes en concepto de perforación de registros, renovación, inspección técnica, gestión por transferencia de inmuebles e hipoteca.
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Arregui explicó en diálogo con ABC Cardinal que este pedido de suspensión obedece a que sólo en Asunción es obligatoria la ITV. Dijo que esta medida sería hasta que esta sea realmente hecha en todas las ciudades, ya que ahora representa una fuga de contribuyentes. Los concejales tratan hoy la minuta.
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Recordó además que los fines de la inspección, que en un principio eran de dar mayor seguridad vial, mejor calidad del tráfico y reducir la contaminación ambiental, ya no se cumplen. Dijo que resulta contradictorio que por Asunción circulen unos 600.000 vehículos y que sólo 30.000 tengan la obligación de pagar, que son los contribuyentes capitalinos.
“Es un monopolio de hecho que realiza Ivesur y se presta para otros negocios”, afirmó Arregui.