30 de abril de 2024
Un Estado con instituciones débiles y susceptibles a la corrupción facilita la consolidación del crimen organizado. Esta es la realidad en América Latina, una región que concentra el 37% de los homicidios cometidos en la tierra, a pesar de que alberga solamente el 8 por ciento de la población total del planeta. La nula acción fiscal, la militarización de las fuerzas de seguridad y falta de fuentes laborales también figuran entre sus principales factores. Aunque Paraguay tiene una tasa de asesinatos menor en relación a otros países, la violencia letal se ha acrecentado en la “frontera seca” con Brasil por el narcotráfico.