El valle del Jordán representa alrededor del 30% de Cisjordania, territorio palestino ocupado por Israel desde 1967.
“El reino afirma que esta declaración es una escalada muy peligrosa contra los palestinos, y representa una flagrante violación de la carta de la ONU y los principios de la ley internacional”, apuntó la agencia oficial de prensa saudita, que apuntó que el reino saudita “condena y rechaza categóricamente” la declaración del primer ministro israelí.
Al mismo tiempo, Arabia Saudita pidió una “reunión de emergencia” de los ministros de Relaciones Exteriores de los 57 países miembros de la Organización de la Cooperación Islámica (OCI) , añadió la agencia de noticias SPA.
En busca de ser reelecto al cargo de primer ministro en las elecciones del 17 de septiembre, Netanyahu lanzó la controvertida promesa de anexar a Israel el Valle del Jordán, en una declaración que de inmediato hizo sonar alarmas en todo el mundo.
Por ello, Arabia Saudita formuló un llamado a la comunidad internacional a que “condene y rechace esa declaración, y que considere nula cualquier acción que resulte de ella”.
“Si recibo de ustedes, ciudadanos de Israel, un claro mandato (...) hoy declaro mi intención de aplicar, con un futuro gobierno, la soberanía de Israel sobre el valle del Jordán y la parte norte del mar Muerto” , declaró Netanyahu en rueda de prensa en Ramat Gan, cerca de Tel Aviv.
Hanan Ashraui, alta dirigente palestina, advirtió que la promesa de Netanyahu no apenas “destruye la solución de los dos Estados, sino que destruye cualquier posibilidad de paz” .
Por su parte, Jordania advirtió que la promesa de Netanyahu “llevaría a toda a la región a la violencia” .