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Los técnicos de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) harán este fin de semana los últimos ajustes al pliego de bases y condiciones de la licitación, para someterlo la próxima semana a una consulta pública.
La titular interina del ente regulador, Ing. Teresita Palacios, confirmó ayer la información a nuestro diario.
Adelantó también que se proponen analizar el documento en pocos días para acortar los plazos, porque se impusieron diciembre de este año como meta para adjudicar la licitación.
Abordamos a Palacios durante el evento sobre banda ancha que Conatel realiza hasta hoy en su sede con Intel Corporation, del que participan técnicos de varias instituciones públicas.
Todo indica que la licitación anunciada desde el año pasado por Conatel se va a concretar ahora. La modalidad será la subasta a la alta. Hasta la fecha no se sabe si lo harán en dos porciones de 15+15 Megahertz o en tres de 10+10 Megahertz, porque son 60 megas las que están disponibles en la banda 1.700-2.100 Megahertz (MHz).
Tampoco se sabe si el pliego excluirá a las empresas telefónicas que poseen porciones del espectro radioeléctrico para el servicio banda ancha móvil 4G.
Coincidentemente con la inminente subasta de la apetecida banda para desplegar la cuarta generación tecnológica (4G o LTE, Long Term Evolution), Mauricio Ramos, un alto ejecutivo de la operadora Tigo, visitó al presidente Horacio Cartes el martes último para informarle de la inversión de la empresa en el país.
Esta es la segunda visita de un integrante del Grupo Millicom al Presidente de la República este año.
En marzo último, el presidente Cartes recibió a Cristina Stenbeck, propietaria de la compañía sueca Investment AB Kinnevik, poseedora de los derechos de Millicom y otras empresas de telecomunicaciones. Vino a exponer el interés de su empresa de seguir invirtiendo en nuestro país.
Dura puja entre las operadoras
La dura competencia entre las operadoras para participar en la subasta se debe a que el espectro radioeléctrico es un bien escaso y no queda para todas.
Personal y Claro consideran que Tigo no debe participar de la subasta, porque ya posee una banda para desplegar la banda ancha móvil de cuarta generación.
Se trata de una porción de 50 Megahertz que adquirió de Cablevisión Comunicaciones (CVC) en 2012, que no está explotando.
Estas mismas operadoras también exigen que Copaco-Vox quede fuera, porque tiene una porción de 40 Megahertz en la banda 1.700 Megahertz y que ya está explotando el servicio 4G.
La telefónica estatal se quedará con 30 Megahertz, porque Conatel le quitó 10 para esta subasta. Es la cantidad indicada teniendo en cuenta que Claro opera con esta cantidad de espectro. Además, Copaco está utilizando mínimamente el espectro que el ente regulador le entregó a pedido de parte, no por licitación, en 2009.