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YATAITY DEL NORTE, Dpto. de San Pedro (Sergio Escobar Rober, corresponsal). La comunidad La Paloma de este distrito fue habilitada por el Instituto Paraguayo del Indígena (Indi) en el año 2013, en una fracción de 136 hectáreas, ubicada a orillas del arroyo Tapiracuãi. En la colonia viven actualmente al menos 50 familias, que en su mayoría se dedican a la actividad agrícola, cría de animales menores y ganados vacunos.
El líder de la parcialidad, César Dosanto, comentó que cuando fueron ubicados en el inmueble, el exintendente local Catalino Brítez (PLRA), habilitó un camino de 1.500 metros de largo para uso de las familias. La calle estaba en el lindero de la propiedad de la estancia “Arco Iris”, propiedad de Jorge Daniel Román, indicó.
Señaló que esta vía fue clausurada meses después por el dueño del establecimiento sin ningún tipo de aviso.
Dosanto manifestó que en la actualidad viven prácticamente atrapados y abandonados a su suerte sin que los responsables de las diferentes instituciones como Indi y la Municipalidad traten de solucionar el conflicto. Dijo que las familias quieren salir del aislamiento para mejorar su calidad de vida.
“Ya no sabemos a quién recurrir para manifestar nuestra situación, porque todos nos prometen que van a solucionar el problema, pero de ahí en más no pasa nada. En el Indi y la Municipalidad, por ejemplo, nos dicen que se está viendo el tema. Sin embargo, hasta hoy seguimos sufriendo por la falta de camino y otras comodidades básicas”, agregó el dirigente.
Sin servicios básicos
Además del problema de la falta de camino, la comunidad carece de numerosos servicios básicos como energía eléctrica, sistema de agua potable, puesto de salud y aulas para la escuelita que funciona en una precaria casa, con pared de madera y techo de paja, expresó César Dosanto.
Dijo que las familias esperan que la Gobernación, administrada por Vicente Rodríguez también les tenga en cuenta.
Intentamos obtener la versión del actual intendente local, Édgar Chamorro (PLRA), pero su celular estaba apagado.