Un funcionario de Copaco muere en caída de columna

LIMPIO (Juan Jara, corresponsal). El funcionario fallecido fue identificado como Jorge Torales, quien sufrió múltiples golpes en todo el cuerpo y por cuya consecuencia murió. Su colega que quedó herido es Ricardo Medina.

Dichos operarios de la Compañía Paraguaya de Comunicaciones (Copaco), específicamente del departamento de planta externa, estaban trabajando en el cambio de un sector del cableado que tenía algunas averías, según la versión de testigos.

Torales subió a una de las columnas de cemento para realizar el trabajo, al igual que Medina, pero por otro poste cercano. Repentinamente, debido al pésimo estado de las columnas, estas se desplomaron en cadena, cayendo con ellas los funcionarios.

Ambos empleados sufrieron múltiples golpes. Sin embargo, Torales no aguantó y su deceso se produjo al llegar al hospital de Limpio.

Efectivos policiales y vecinos de la zona socorrieron a los trabajadores en un primer momento, mientras se aguardaba la ambulancia, la cual llegó luego de unos minutos. Torales y Medina estaban con 9 y 8 años de antigüedad dentro de la empresa.

Denuncia

Varios empleados de la Copaco SA, acongojados por la muerte de un compañero, denunciaron las malas condiciones de trabajo dentro de la empresa estatal.

Según dicen, desde hace varios meses ellos cuestionan el pésimo estado de calidad en que se encuentra la mayoría de los postes de la telefónica. Sin embargo, los responsables hacen caso omiso a los reclamos. “Ahora tenemos que perder a un compañero por culpa de la inoperancia de nuestras autoridades”, expresó un funcionario que pidió el anonimato.

Asimismo, sostienen que actualmente dentro de la empresa estatal existe una burocracia extrema para conseguir algunos elementos básicos como los cables, cubiertas, postes y hasta combustibles para la realización de los trabajos.

“Falta de todo y además trabajamos bajo este tipo de situaciones, donde nuestras vidas están en peligro ahora. Existe la misma logia de gerentes de la época de Mario Esquivel. La empresa está a la deriva”, dijo uno de los trabajadores.