Damnificados cierran Félix Bogado y generan un molesto caos vehicular

El flujo vehicular que se dirige a Asunción desde Lambaré por la avenida Félix Bogado se vio interrumpido una cuadra antes de llegar a Japón debido a la manifestación de un grupo de aproximadamente 100 pobladores del bañado Sur de la capital.

Con pancartas que exhibían mensajes de rechazo a la gestión del intendente de Asunción, Arnaldo Samaniego, los manifestantes cortaron la arteria entre las 7:00 y las 9:30, generando un caos vehicular que motivó la molestia de los automovilistas que circulaban por la zona.

La manifestación estuvo encabezada por pobladores y trabajadores sociales del Bañado Sur, además de activistas de partidos y movimientos de izquierda que operan en la zona ribereña.

Un activista, que prefirió el anonimato y dijo temer represalias, informó a nuestro medio que el motivo de la protesta era la falta de asistencia por parte de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) y la fuerte injerencia política del Partido Colorado en el Bañado Sur que, según mencionó, canaliza la ayuda estatal a través de una “coordinadora paralela”.

Uno de los pobladores, quien dijo llamarse Roberto Pérez, indicó que los bañadenses optaron por no brindar datos sobre la manifestación a los trabajadores del diario ABC Color, al que acusaron de “mentiroso”.

Al consultarle los motivos de su disconformidad con las publicaciones, mencionó que tras la protesta realizada el pasado 4 de julio frente a Mburuvicha Róga, nuestro medio no informó con veracidad la cifra de pobladores que cerraron la avenida Mariscal López. Según expresó, los manifestantes superaban las 350 personas cuando ABC Color reportó que eran 150.

Abordado sobre el lugar donde vive, se limitó a decir: “en el Bañado Sur”, sin poder especificar siquiera el barrio donde reside.

Luego de las 9:30, los pobladores retornaron hacia el Bañado Sur, dirigiéndose por la avenida Félix Bogado. Los conductores que esperaban seguir su trayecto retomaron su camino. Datos de la Comuna capitalina indican que, luego de dos meses de crecida, la cifra de familias damnificadas se estancó en 17.784.