Indert descubre dictamen ilegal en favor de Blanco

Uno de los sonados casos se refiere al ministro Blanco, quien en 1987 fue adjudicado por el entonces Instituto de Bienestar Rural (hoy Indert) con dos inmuebles de 5.000 hectáreas en total, situados en la colonia Kahija, del distrito de Eugenio A. Garay (Boquerón), a un precio de G. 3.900.000 cada uno, según la resolución número 204.

Supuestamente, Blanco devolvió las tierras, pero en realidad transfirió a nombre de su esposa, quien posteriormente cedió a un uruguayo (Horacio del Corazón de Jesús Fernández) al precio de US$ 300.000.

Camacho reveló que el 4 de mayo pasado, dos funcionarios: el jefe de Auditoría Interna, César Martínez; y la abogada de la institución, Liz Perla Torres (ex alumna de Blanco), elaboraron y firmaron un dictamen que “blanquea” al ministro de la Corte. Camacho señaló que anuló el dictamen porque no fue consultado como interventor.

Barreto no sigue

Camacho no dijo directamente, pero dio a entender que el suspendido titular del Indert, Marciano Barreto, ya no sigue en el cargo. Dijo que el Jefe de Estado debe nombrar a un nuevo presidente y desconoce en quién recaería la responsabilidad.

El asesor jurídico de la Presidencia indicó que su trabajo de interventor está terminado en un 90% y tampoco aspira a ser titular del Indert.

Manifestó que se recuperaron 60.000 hectáreas en el Chaco y que quedan millones de hectáreas por recuperar.

Dictamen ético a ministro, en 60 días

El Tribunal de Ética resolvió, tras la sesión ordinaria del lunes pasado, admitir el procedimiento de oficio al ministro de la Corte Suprema Sindulfo Blanco, por “mentir”. La investigación amplia iniciada por el Tribunal debe concluir en un plazo de 60 días, según establece el Código de Ética Judicial.

Blanco, en una entrevista, admitió el martes 24 de abril pasado a Radio Cardinal que “mintió” en la audiencia pública realizada en el 2004, cuando declaró que los miembros del alto tribunal no son inamovibles desde su nombramiento, porque pretendía el cargo en ese momento.

Los antecedentes de esta “confesión” fueron solicitados por la Oficina de Ética Judicial y luego tramitados por el Consejo Consultivo y el Tribunal de Ética, que resolvió justamente el lunes pasado, iniciar la investigación amplia del caso.

“Quiero dejar en claro lo siguiente a la ciudadanía: Yo mentí, confieso que mentí, pero fue una mentira de salvación porque yo sabía que eso era ilegal, eso de la ilegalidad no se puede plantar. Si yo digo cinco años y la Constitución dice que es ilegal, yo tengo que aceptar y mentí porque yo consideraba un ascenso, un premio a mi larga y mi proficua y honesta trayectoria de magistrado y es impensable que un magistrado, que ya tenía dos confirmaciones, sea castigado colocándosele en la guillotina”, declaró textualmente a Radio Cardinal en el programa de Roberto Sosa y Guillermo Domaniczky.

“Me vi obligado”. “Me vi obligado, esta declaración es nula de nulidad absoluta. Claro, pero qué vas a hacer si uno quiere tener el premio y resulta ser que para obtener el premio le extorsionan; es una suerte de pagaré en blanco”, dijo el ministro.

Justificó que los senadores estaban cometiendo un crimen en su contra, razón por la cual mintió para salvarse y pidió disculpas a la ciudadanía. El Tribunal había sancionado a Víctor Núñez y a Torres Kirmser por haber asistido al cumpleaños de “Calé” Galaverna.