“Castigar” casos de acoso

Javier Díaz Verón, fiscal general del Estado, se refirió al caso del padre Silvestre Olmedo, denunciado por acoso sexual, tras la misa central de Caacupé. Refirió que la misión del Ministerio Público es investigar y castigar estas situaciones.

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Díaz Verón conversó con los medios de prensa tras la misa central de Caacupé y sus declaraciones fueron recogidas por radio ABC Cardinal. Sobre el caso del sacerdote de Limpio, comentó que los hechos de abuso o acoso a menores constituyen “una situación que alarma”. Si bien en el caso de este sacerdote no están implicados menores de edad, el fiscal general puntualizó este caso específico.

“Tenemos la responsabilidad de castigar. Depende de las denuncias que existan. Muchas veces este tipo de casos se esconden y solo cuando llega a través de la prensa se conocen”, manifestó el fiscal general. En relación a este tema, Díaz Verón quiso evadir la cuestión central e indicó que el Ministerio Público debe castigar por estos casos “a sacerdotes, políticos o un ciudadano común”.

En la misa de Caacupé no se abordó el tema del cura Olmedo. El arzobispo de Asunción y presidente de la Conferencia Episcopal Paraguaya, Mons. Edmundo Valenzuela, mantiene un hermético silencio hasta este jueves sobre este punto.

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