“Jefa de cafetería” cobra millones en Cámara de Diputados

Al igual que en el Senado, en la Cámara de Diputados existen cuestionados cargos con millonarias remuneraciones. Por citar algunos casos, la jefa de cafetería de ese organismo cobra casi G. 13 millones al mes. Además, la jefa de la Central Telefónica percibe cada mes G. 12.500.000 y la de impresiones G. 5.400.000.

Raúl Latorre, presidente de la Cámara de Diputados.
Raúl Latorre, presidente de la Cámara de Diputados, y a la derecha, Máximo Medina, director interino de Recursos Humanos.ARCENIO ACUÑA

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La funcionaria permanente Virina Burgos de Insfrán funge como jefa del departamento de Cafetería de la Cámara de Diputados, por lo cual percibe mensualmente G. 12.927.770.

Ningún trabajo es menos que otro y todos son dignos si se los ejerce con honestidad y entrega. Además en casi todos los países se establece un salario mínimo para proteger a los trabajadores contra pagos muy bajos. Pero en el Congreso muchas remuneraciones son muy elevadas que superan a lo que perciben profesionales del sector privado.

En el caso de Burgos de Insfrán, solo como salario percibe G. 11.000.000 y ello se el agregan ingresos en concepto de “bonificación” de G. 1.500.000 y “remuneración extraordinaria” consistente en G. 427.770, que en conjunto representan unos G. 13 millones. En los registros no consta que posea título terciario.

Jefa de Central Telefónica de Diputados

Por su parte, también goza de un elevado sueldo la jefa del Departamento de Central Telefónica de la Cámara de Diputados, Leónidas Núñez de Santacruz.

La mujer percibe mensualmente G. 12.500.000 en concepto de salario y bonificación. En su caso tampoco consta (en sus declaraciones juradas ni en la planilla de Diputados) que posea título universitario.

Por otra parte, en aquel organismo también hay una jefa de departamento de Impresiones y Encuadernación y su ingreso difiere bastante de las dos anteriormente citadas. Se trata de Elvira Ramírez Espínola, funcionaria permanente que cobra G. 5.400.000, entre salario y bonificaciones, y que tampoco registra título terciario.

Además aparece en la nómina una jefa del departamento de Lactancia, que fuera de la relación que se podría hacer con tantos casos de “nepobabies” que hay, dicen que es por una “exigencia” de la ley. La jefa de ese departamento es Tomasa Pereira, que entre salario y bonificaciones cobra G. 5.900.000.

A diferencia de los otros casos, Pereira al menos posee título de licenciada en Ciencias Políticas.

Cabe mencionar que la Ley Nº 5508 de “Promoción, Protección de la Maternidad y Apoyo a la Lactancia Materna”, establece la obligatoriedad de contar en los lugares de empleo con un lugar específico que las madres lactantes puedan usufructuar.

Puntualmente el artículo 14 de dicha normativa establece que “el empleador dará el tiempo necesario a la madre trabajadora en su empleo, para realizar la extracción de la leche materna, para lo cual brindará las condiciones necesarias y contará con una sala de lactancia”.

En este caso lo que podría cuestionarse es la designación de una “jefatura” a cargo de dicho departamento.

Los casos de funcionarios con millonarios salarios se suman a la decena de casos de hijos, esposas, yernos y otros parientes de legisladores ubicados en la plantilla del Congreso, gracias a la influencia de sus padres. Algunos son designados asesores pese a no tener título.

“Cumplemes” de promesa de Raúl Latorre

Ayer se cumplió un mes de la notificación del presidente de la Cámara de Diputados, Raúl Latorre (ANR, HC), de la realización de un supuesto concurso de méritos y aptitudes para contratar a unos 50 jóvenes en la Cámara Baja.

El anuncio había sido emitido como una “cortina de humo” para tratar de desviar las atención de los casos de presunto nepotismo que estallaron en la Cámara Baja y que luego se propagaron al Senado. Latorre había dado dicho aviso y luego se retiró sin admitir preguntas sobre su gestión. Ahora está investigado por estos casos.

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