Freddie Steward anotó el primer ensayo de Inglaterra a los seis minutos para neutralizar el golpe de castigo con el que James O'Connor abrió el marcador.
O'Connor mantuvo a Australia en la lucha hasta recortar la ventaja de los anfitriones hasta el 16-15 al descanso.
En la reanudación Inglaterra fue abriendo brecha merced a una serie de dos golpes de castigo convertidos por Owen Farell y uno más de Marcus Smith, antes de que Jamie Blamire firmara su sexto ensayo en sólo cuatro apariciones para establecer el 32-15.
Owen Farrell acabó el partido con cinco golpes de castigo convertidos. Australia anotó todos sus puntos con otros cinco de James O'Connor.