Según Goralewski, la empresa propietaria de los tres camiones que fueron retenidos en Miga Porã fue autorizada para la extracción de los árboles. “Esta carga de madera fue notificada el viernes a la tarde; se llamó al equipo, se hizo el control de rollos y estaba todo ok”, señaló a radio ABC Cardinal 730AM.
Igualmente, comentó que la carga fue fiscalizada –se hizo el control de medidas de los rollos y de la documentación correspondiente– y las guías amparaban el traslado de los rollos.
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Todos los datos de la fiscalización constan en el acta hecha por el Ministerio Público, según indicó. “Los tres camiones están avalados por guías de traslado. Se constata que se hace una tala selectiva y que sea sostenible”, subrayó.
En ese sentido, afirmó que la empresa es Palo Verde, responsable del cargamento de rollos, opera de forma legal.
La ejecutiva no pudo precisar el nombre de los propietarios de la empresa en cuestión ni su nacionalidad.
Aseguró que todas las especies que fueron extraídas están permitidas y que los rollos no provienen de una deforestación, sino de una tala selectiva, pero el bosque continúa. Manifestó que la extracción es positiva ya que permite el ingreso de más luz y la regeneración positiva.
Por otra parte, negó que los rollos en cuestión provengan de la Reserva Natural Morombí, de donde más de 2.000 hectáreas de bosques desaparecieron en los últimos dos años.
Sobre la extracción ilegal de los árboles manifestó: "El rollotráfico existe y es un gran flagelo para nuestro país; lo vengo denunciando desde que se llegué al Infona. Nosotros prácticamente cada semana hacemos intervenciones; lo publicamos en nuestras redes sociales”. También aseguró que ante cada denuncia, cuando identifican casos, realizan intervenciones.
El pasado viernes, un grupo de jóvenes retuvo tres camiones repletos de rollos de árboles de especies nativas en el distrito de Minga Porã, norte del Alto Paraná. La carga fue trasladada a la comisaría local, fue verificada y los encargados presentaron los documentos de traslado. Ayer lunes, se manifestaron para exigir que se investigue el permiso para la extracción de madera de especies nativas. Se sospecha que los árboles fueron extraídos de una reserva del distrito de Mbaracayú.