Hay un Paraguay sufriente y otro de los que “están mejor”
La imagen de alumnos soportando el frío en una clase impartida bajo un árbol en Nueva Asunción, a pocos kilómetros de nuestra capital, frente a una pizarra apoyada en el piso y compartida con los de otros grados, refleja bien el desastre del sistema educativo, ante la indiferencia del ministerio respectivo y de los legisladores que no pierden ocasión para proclamar su condición de “representantes del pueblo”. Contrasta esto con las frecuentes proclamas del presidente Santiago Peña de que vivimos poco menos que en un paraíso. Sin duda, hay un Paraguay sufriente y otro de los que mandan y “están mejor”.
Fonacide: Brecha en infraestructura podría bajar recién en 18,6 años si no se usan otros fondos, afirman
Ver más