Asunción respira… aire tóxico

Un elevado nivel de contaminación, incluso superior al de las capitales de los demás países de la región, fue constatado por técnicos del Centro Mario Molina de Chile a pedido de la Comisión Nacional de Defensa de los Recursos Naturales (Conaderna).

“El aire que aspiramos es cinco veces más tóxico que en las principales capitales de la región”, sostuvo Fernando Silva Facetti, presidente de dicha comisión del Legislativo.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda una exposición al material particulado de hasta 35 microgramos por metro cúbico; sin embargo, el documento llega a la alarmante conclusión de que Asunción alcanza hasta 100 microgramos por metro cúbico.

El trabajo de campo consistió en un recorrido por varias calles de la ciudad, iniciándose en la avenida Aviadores del Chaco, donde se hizo una medición del hollín con un monitor portátil desde la intersección con Santa Teresa -donde se registró el más alto índice de contaminación- hasta las calles del microcentro como Brasil y 25 de Mayo, Cerro Corá, Azara y Luis Alberto de Herrera.

El ingeniero Gianni López, director del Centro Mario Molina de Chile, fue el que encabezó el trabajo de campo llevado a cabo el pasado martes 11 de marzo.

Mario Molina es un centro con vasta experiencia dedicado a estudios e investigación relacionados con la calidad del aire y la promoción de energías y tecnologías más limpias en Chile y Latinoamérica.

Silva Facetti explicó que una de las posibles causas de este alto índice de contaminación podría ser principalmente la mala calidad del combustible diésel, así como los buses 'chatarra' que circulan en el área metropolitana.

En ese sentido, teniendo en cuenta estadísticas proporcionadas por el concejal Gustavo Lird, las estimaciones del parque automotor solo de ciudadanos asuncenos es de aproximadamente 280.000 vehículos, sumados a los más de 350.000 que ingresan diariamente de ciudades aledañas.

“Hablamos del ingreso de 630.000 vehículos en promedio que debe soportar diariamente la ciudad de Asunción”, enfatizó el edil.

Estadísticas de la Dirección de Tránsito de la Comuna precisan que aproximadamente 12.000 rodados corresponden al transporte público, que ingresan y salen de la ciudad cuatro o cinco veces al día.

Al respecto, Lird recordó que las flotas de las empresas de transporte cuentan en su mayoría “con unidades en estado de chatarrización que acumulan desde hace años”.

El segundo Estudio de Calidad de Aire en Asunción -el primero se llevó a cabo en diciembre de 2010- sostiene que el aire que respiramos contiene dióxido de azufre (SO2), monóxido de carbono (CO), dióxido de nitrógeno (NO2), oxidante fotoquímico (ozono) y material particulado respirable.

De forma recurrente, a través de la sección Crónicas Ciudadanas de ABC Color, lectores manifiestan su preocupación enviando sus denuncias respecto a este tema.

Las quejas muestran generalmente tanto vehículos particulares que emiten humo negro como autobuses que circulan en malas condiciones.

A esto se suman las consecuencias en la salud que podrían desencadenarse por la polución del aire: una evaluación de la OMS estima que casi 2 millones de muertes prematuras se pueden atribuir cada año a los efectos de la contaminación del aire en espacios abiertos urbanos.

A nivel nacional, la Sociedad Paraguaya de Alergia, Asma e Inmunología corroboró, a través de un estudio llevado a cabo en 1.998 con una muestra de niños de 13 y 14 años en Asunción, los altos índices en la prevalencia síntomas de rinitis alérgica, repesentando alrededor del 34%, constituyéndose en el índice más alto en América Latina ya en ese entonces.

En 2002, el mismo estudio se repitió, constatándose un 42%, lo que significa un aumento de 8 puntos porcentuales en tan solo cuatro años.

En la legislación paraguaya, la Constitución Nacional, en su artículo Nº 7, garantiza que “toda persona tiene derecho a habitar en un ambiente saludable y ecológicamente equilibrado”.

A nivel municipal, la ordenanza Nº 119/07 regula la contaminación del aire urbano y quema de basuras y establece los niveles tope de emisión e inmisión de gases en industrias y vehículos de combustión interna; además de la ordenanza Nº 277/09, que establece multas en materia de contaminación.

Sin embargo, a criterio de Lird, la normativa vigente “es ambigua y establece penas mínimas, además de que las unidades de transporte público y vehículos en general están prácticamente todos dentro de los límites permitidos y los controles realizados no son suficientes”.

Según explicó, todos estos factores lo llevaron a la presentación de una minuta que solicitaba, entre otros puntos, controles más continuos y de mayor alcance tanto en vehículos particulares como en el transporte público en coordinación constante tanto con la Secretaría de Transporte del Área Metropolitana (Setama) como con la Secretaría del Ambiente (Seam).

El proyecto fue tratado sobre tablas en el marco del plenario de la Junta Municipal del pasado 25 de febrero, siendo aceptado y saliendo con carácter resolutivo y con destino al Ejecutivo municipal.

De esta manera, queda en manos del intendente Arnaldo Samaniego aprobar y poner en vigencia esta ordenanza, que según Lird, podría mejorar considerablemente la calidad del aire, necesidad verdaderamente imperiosa teniendo en cuenta los niveles de aire contaminado que respiramos diariamente.