Julio Verne (1828 – 1905), el gran artífice de la ciencia ficción, nos brinda en esta novela una muestra de su enorme capacidad para llevar al lector a cualquier mundo y mantenerlo en vilo y siempre a la expectativa en el transcurso de ese periplo literario.
“Viaje al centro de la Tierra”, publicada originalmente el 25 de noviembre de 1864, es una de esas novelas en las que el escritor francés brinda sus muestras de conocimientos científicos casi asombrosos, al mismo tiempo que maneja el sentido de la aventura y del suspenso como pocos escritores saben hacerlo.
Un profesor de mineralogía, su sobrino y un acompañante islandés constituyen un trío inolvidable que nos conduce hasta el centro mismo del planeta y en ese viaje nos va abriendo un universo maravilloso sustentado en la verosimilitud de las descripciones y las situaciones creadas en ese desconocido interior de la Tierra.
Verne logra plenamente el acompañamiento del lector a sus protagonistas desde el inicio mismo de su conmovedora odisea. Hay un largo preparativo, tanto de los personajes como de quien lee la obra, lo que permite ir creando el clima de lo que se vivirá después. El suspenso comienzo ya en el descubrimiento de un libro escrito por un sabio islandés, Arne Saknussemm, en el que deja establecidos, enigmas mediante, que siglos atrás estuvo ya en el centro interior de la tierra. El sabio islandés dejó marcado el itinerario que debía seguir quien lo imitaría posteriormente en el señalado viaje.
Descifrar los enigmas de aquel primer viajero dio pie luego a que el profesor Lidenbrock se decidiera a repetir la hazaña, para lo cual se hizo acompañar por su sobrino Axel, joven estudioso, intelectualmente digno de su tío, quien, temeroso al inicio, se volvió luego un personaje central cuyo protagonismo se acentuó al ser él mismo el narrador de la aventura.
Verne traza su historia haciendo que todo parezca verosímil desde las explicaciones lógicas que iban exponiendo el profesor y su sobrino de los fenómenos que encontraban a su paso.
El autor maneja dosificadamente la acción y la va tensionando lenta pero persistentemente de manera que el lector no pueda soltar ese viaje que también emprende en compañía de los protagonistas.
La historia ya fue llevada al cine en más de una oportunidad. La última en el año 2008. También hay una versión musical a cargo del tecladista británico de rock Rick Wakeman.
El ejemplar llegará a los lectores al precio de G. 20,000, diario más libro.