Antes de las 9:00, los operarios del Ministerio de Obras Públicas y de su contratista terminaron de trasladar seis árboles de los 157 que deben trasplantar.
Ejecuta el proyecto el consorcio D-R Costanera (integrada por CDD Construcciones SA y Benito Roggio e Hijos SA). Le adjudicaron un contrato de G. 361.575 millones, que ya trepó a G. 411.000 millones.
El plan contempla la construcción de un viaducto de más de 1.300 metros, que atravesará las avenidas Sacramento, Artigas y la calle Fiebrig; un paso a desnivel de 460 metros sobre la avenida Primer Presidente y la ampliación a cuatro carriles de la interconexión de la Autopista Ñu Guasu y la Transchaco.
Mientras con máquinas realizaban el trasplante de los árboles a escasos metros de donde fueron extraídos, otros operarios armaban los pilotes para el futuro viaducto.
El ingeniero ambiental del MOPC, Ing. Luis Gil, explicó que esta es la primera vez que se realiza este tipo de trabajo en nuestro país. Reiteró que para asegurar el menor impacto plantaron más de 2.000 arbolitos en la Costanera. La contratista es la responsable de su cuidado. Debe reponer en el caso de que se sequen o se roben.
Explicó que se realiza la extracción del árbol con una máquina hidráulica, que extrae desde la raíz el árbol y lo traslada hasta su ubicación final, lugar que es preparado previamente con nutrientes especiales, como materia orgánica e hidrogel, un componente químico que permite retener la humedad del suelo. Durante el trasplante se remueven hasta un 40% del sistema de raíces absorbentes del árbol, por lo que el suelo debe ser preparado mediante una serie de operaciones que aseguren la producción de raíces finas cerca del tronco. El proceso concluye en seis meses tras monitoreo y control fitosanitario.
Un total de 117 árboles fueron talados porque tenían termitas.