Tras el largo debate y una votación primero a viva voz y luego con papeletas, la ley impulsada por el Gobierno indio obtuvo en la Cámara Alta, donde no contaba con mayoría y tuvo que buscar apoyos, 125 votos a favor, 61 en contra y una abstención.
Con esta aprobación y el consecuente control ahora de Nueva Delhi, pierde su efecto el artículo 370 de la Constitución, que otorgaba un estatus especial a Jammu y Cachemira, como su propia Carta Magna que brinda derechos especiales a sus ciudadanos, los únicos que podían por ejemplo adquirir propiedades en la región.
El estatus especial de Cachemira se remonta a 1947, cuando tras la división de la India británica en dos estados, Pakistán (para los musulmanes) y la India (para los hinduistas).
En ese entonces, el marajá que regía Cachemira decidió que este territorio, de mayoría musulmana, fuera territorio indio.
Pero, Pakistán reclamó el territorio (por su población musulmana), y esto ha llevado a dos guerras y un permanente conflicto entre ambos países.