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Las restricciones a los viajes establecidas por los gobiernos debido a la pandemia de coronavirus fueron parcialmente compensadas con reducción de gastos de personal y de costes de producción variables, como el combustible, explica SAS en su balance.
La pérdida neta de explotación (ebit) fue de 5.494 millones de coronas (535 millones de euros), un 42 % menos.
Los ingresos netos ascendieron a 13.958 millones (1.358 millones de euros), un 32 % peor.
SAS señaló que 2021 ha sido "uno de los años más exigentes en la historia de la industria de la aviación" y que el futuro sigue siendo "difícil de predecir", sobre todo por las restricciones.
En el cuarto trimestre (agosto-octubre), la pérdida neta fue de 744 millones de coronas (72 millones de euros), un 71 % menos.
El ebit ascendió a un valor negativo de 474 millones (46 millones de euros), lo que supone una mejora del 83 %.
Los ingresos ascendieron a 5.762 millones (561 millones de euros), un 90 % más interanual.
La aerolínea escandinava, controlada por los estados sueco y danés, resaltó la subida de la demanda en el último parcial, con un aumento de la capacidad del 43 % respecto al trimestre anterior.