El líder del Partido de los Trabajadores (PT) afirmó que el episodio protagonizado por Jefferson “refleja el resultado de lo que sucede en el Gobierno” de Bolsonaro, que aspira a su reelección.
"Bolsonaro intentó transmitir la idea de que no tiene nada (que ver) con Roberto Jefferson y lo tiene todo con Roberto Jefferson", señaló durante una rueda de prensa en Sao Paulo.
Jefferson, un aliado de Bolsonaro, protagonizó ayer un grave incidente al resistirse a una orden de detención expedida por la Corte Suprema luego de que publicara una serie de ataques y amenazas verbales contra una de las magistradas del alto tribunal.
El político reaccionó con disparos de fusil y con granadas al intento de la Policía Federal de arrestarlo, lo que resultó con dos agentes heridos, e ingresó este lunes en una cárcel de Río de Janeiro.
"El caso de Roberto Jefferson es un caso de Bolsonaro. Él fomentó eso (el porte de armas) y lo está cultivando (...) Es una locura más de un país que instiga a través de su presidente el odio a la sociedad", recalcó.
Pese a que Bolsonaro intentó desmarcarse del exdiputado, lo tildó de "bandido" y hasta llegó a afirmar que no existían fotografías de ambos juntos, las imágenes de ambos abrazados en un acto en la Presidencia se multiplicaron en las redes a solo una semana de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales del domingo.
Lula acusó a Bolsonaro de ser un “mentiroso compulsivo sin control” y afirmó que los brasileños deberán de elegir entre dos alternativas el próximo domingo: “La democracia” o “la barbarie del neofascismo”.