El documento, denominado 'Balance de la situación de los derechos de la Niñez y Adolescencia en El Salvador 2021-2022', fue elaborado y por la Alianza por los Derechos de la Niñez, Adolescencia y Juventud en el país.
Una de las conclusiones del estudio señala que la violencia sigue siendo una problemática que afecta los derechos de la niñez y adolescencia y los ámbitos identificados son la violencia familiar, social, institucional, la violencia en entornos virtuales y la violencia por razones de género.
Añade que la manifestación de violencia implica impactos que afectan el desarrollo integral de niños y adolescentes, a nivel físico, psicológico, sexual, emocional y espiritual.
Según el informe, las Juntas de Protección de la Niñez y Adolescencia reportaron 14.962 casos de violencia en 2021, lo que refleja un aumento con respecto a 2020, cuando la cifra fue de 9.416.
"La integridad personal es el principal derecho amenazado o vulnerado de la niñez y la adolescencia", apunta.
Da cuenta, además, que los delitos contra la libertad sexual cometidos contra la niñez y adolescencia en 2021 fueron 3.351, un aumento con respecto a 2020 cuando se presentaron 2.578.
El número mayor de estos delitos fueron cometidos en niñas y adolescentes mujeres, con un total de 3.121 víctimas, mientras que en niños y adolescentes hombres fue de un total de 230 víctimas.
Se registró, de acuerdo con las estadísticas, un mayor número de delitos contra la libertad sexual en niños menores de 12 años. Para el sexo femenino es diferente, ya que el mayor número de delitos de este tipo fue cometido en adolescentes mujeres entre los 13 a 17 años.
"Las iniciativas y programas existentes no son suficientes para atender las necesidades de las niñas, niños y adolescentes, que se encuentran en situación de vulnerabilidad o que sus derechos han sido vulnerados", plantea.
Según el análisis realizado por los responsables del informe, en El Salvador "no existen programas especializados en razón de la necesidad e idoneidad según las afectaciones que enfrenta la niñez, como por ejemplo para menores en situación de calle, drogodependiente o con enfermedades psiquiátricas, los que viven en cárceles, las víctimas de violencia sexual, los que cometen abuso sexual y los que están conflicto con la ley, entre otros".
"Hay ausencia de programas de educación integral de la sexualidad y fortalecimiento familiar y comunitario para la prevención de la violencia sexual y el embarazo en niñas y adolescentes, que aborden la desnaturalización de la problemática y los derechos sexuales y derechos reproductivos de adolescentes", subraya.
La Alianza por los Derechos de la Niñez recomienda al Estado salvadoreño fortalecer el Sistema Nacional de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia, con capacitación técnica de profesionales de las instituciones públicas en función del reconocimiento de los derechos humanos de la niñez.
Además, ve necesario la actualización de un marco regulatorio y de herramientas para la articulación y coordinación entre las instancias del Sistema.
La realización del informe contó con el apoyo de la Organización de Mujeres Salvadoreñas por la Paz (Ormusa), la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (Fespad), la Asociación Movimiento de Mujeres Mélida Anaya Montes (Las Melidas) y el Instituto de Investigación Capacitación y Desarrollo de la Mujer (IMU).