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Kappan, que siempre alegó que el propósito de su viaje a la ciudad de Hathras, donde se produjo la violación en grupo de una dalit o ‘intocable’, era periodístico, destacó hoy a los medios tras su excarcelación que “el periodismo no es un crimen” y resaltó que continuaría su lucha “contra las leyes draconianas” que llevaron a su arresto.
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“Solo fui allí para hacer mi trabajo (...) No encontraron nada conmigo, solo un ordenador portátil y un teléfono móvil”, agregó el periodista.
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Las autoridades detuvieron a Kappan en octubre de 2020, acusado de intentar crear disturbios en la ciudad envuelta en protestas por el brutal crimen.
Le culparon de recibir dinero del Frente Popular de la India (FPI), una controvertida organización musulmana acusada de vínculos con organizaciones terroristas y de promover el extremismo, que fue ilegalizada el pasado septiembre.
Periodista indio pagó fianza
Pese a que el Tribunal Supremo de la India le había concedido la libertad bajo fianza en septiembre, su liberación quedó pendiente de la resolución de otro caso relacionado con lavado de dinero, según informó el medio especializado local LiveLaw.
Un caso que llegó ayer a su conclusión, cuando un tribunal firmó la orden para dejar a Kappan en libertad previo pago de la fianza por su parte.
Su detención se produjo bajo la Ley de prevención de actividades ilegales (UAPA, en inglés), de ámbito antiterrorista, tachada de draconiana y ampliamente criticada hoy por el periodista.
Los cuestionamientos sobre esta y otras leyes similares parten de que imponen duras condiciones a la obtención de la libertad bajo fianza, sin contar con las normativas específicas de varias regiones.
Periodista indio denunció fue acallado por su voz crítica
El arresto de activistas y periodistas bajo este tipo de leyes son habituales en la India, que tiene a su disposición un amplio abanico legal que, según organizaciones civiles y detractores del Gobierno, se usa acallar las voces críticas.
La India ocupó el puesto 150 de 180 países en el índice de libertad de prensa 2022 de Reporteros sin Fronteras (RSF), una caída de ocho puestos con respecto al año anterior.
Otro informe del grupo de reflexión Rights & Risks Analysis Group (RRAG) publicado el pasado febrero criticó el deterioro continuo de la libertad de prensa en la India, donde al menos seis periodistas fueron asesinados y otros 17 arrestados a lo largo de 2021.