Siguiendo información precisa de inteligencia de la Agencia Israelí de Seguridad (el servicio de inteligencia interior Shin Bet), "soldados del Ejército detuvieron al terrorista que abrió fuego en Tekoa", informó un portavoz militar tras cinco horas de búsqueda del responsable.
El atacante fue detenido en la ciudad palestina de Belén, donde tropas israelíes llevaron a cabo redadas que dejaron diez heridos por inhalación de gases lacrimógenos, indicó la Media Luna Roja Palestina.
La identidad del atacante no ha sido revelada ni ningún grupo palestino ha reivindicado la agresión.
El servicio de emergencias israelí Maguén David Adom (MDA) fue el primero en informar del ataque, ya que sus paramédicos acudieron al lugar de los hechos para atender a los heridos: un hombre de 35 años con lesiones graves pero consciente por heridas de bala, y sus dos hijas, de 14 y 9 años, heridas moderadas por impacto de metralla.
Poco después, MDA trasladó a los heridos, el padre y las dos niñas, al hospital Shaare Tzedek, de Jerusalén.
"Los disparos se produjeron desde un vehículo que pasaba por el cruce de Tekoa. Como resultado del tiroteo, un civil resultó herido y otros dos civiles fueron heridos por metralla", aclaró un portavoz militar cuando ocurrió el ataque.
El Consejo Yesha, ente de gobierno regional que aglutina todos los asentamientos colonos de Cisjordania ocupada, lamentó el suceso e identificó a las víctimas como Elroi Kapach y sus hijas Rachel y Avigail, residentes del asentamiento cercano de Nokdim, que junto con Tekoa forma parte del consejo regional de Gush Etzion, conjunto de colonias israelíes de la zona sur.
"Fue una mañana terrible con noticias difíciles, ya que hubo un tiroteo terrorista aquí en el área Gush Etzion. Estamos hablando de un área donde no ha habido ataques terroristas serios (con víctimas) durante años. No cederemos ante los terroristas que buscan derramar sangre judía y echarnos de nuestro país", indicó el presidente del Consejo Yesha y alcalde de Gush Etzion, Shlomo Neeman.
En las últimas semanas se han incrementado los ataques palestinos contra asentamientos o puestos miliares israelíes en la zona, muchos de ellos reivindicados por Hamás, a raíz de que el Ejército israelí lanzara una operación militar a gran escala, por tierra y aire, sobre la ciudad de Yenín, al norte de Cisjordania, histórico bastión del movimiento palestino y que Israel considera el mayor "foco de terrorismo" en el área.
Cisjordania ocupada vive su mayor espiral de violencia desde la Segunda Intifada (2000-2005) y este 2023 ya han muerto 161 palestinos en el marco del conflicto palestino-israelí, la mayoría milicianos en enfrentamientos armados con tropas israelíes y atacantes, pero también civiles, incluidos 27 menores.
En paralelo, el área ha visto la proliferación de nuevos grupos armados palestinos, que realizan cada vez más ataques y han dejado 27 muertos del lado israelí, la mayoría colonos, cinco de ellos menores, y 3 uniformados.