“Con estos ataques, Estados Unidos y Reino Unido buscan escalar las tensiones y la crisis en la región, y expandir el alcance de la guerra y la inestabilidad”, afirmó en un comunicado el portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Naser Kananí.
El diplomático afirmó que los cuartos bombardeos de Washington y Londres contra los hutíes muestran su “total apoyo a los crímenes de guerra y el genocidio del régimen sionista (en alusión a Israel) en Gaza y Cisjordania”.
Kananí mostró su convicción además de que estos ataques no lograrán ningún objetivo.
Estados Unidos y el Reino Unido bombardearon el sábado 18 "objetivos" en ocho ubicaciones distintas de los rebeldes hutíes en Yemen, en lo que supone la cuarta operación conjunta de las dos naciones contra ese grupo.
Los ataques se producen en respuesta al creciente número de ataques de los hutíes contra diversas embarcaciones, incluyendo el lanzamiento de misiles contra un carguero británico y un destructor estadounidense en el mar Rojo, así como contra la ciudad costera de Eilat, en el sur de Israel.
Los hutíes aseguran que sus ataques en el mar Rojo son una represalia por la ofensiva que Israel lanzó sobre la Franja de Gaza después del ataque del grupo palestino Hamás el 7 de octubre de 2023.
Teherán lidera el llamado Eje de la Resistencia, una alianza informal formada por organizaciones militantes como Hizbulá, los rebeldes hutíes, el movimiento islamista Hamás o las milicias en Irak, entre otros grupos.