Tras una reunión con su homólogo egipcio, Badr Abdelatty, Wang indicó en una rueda de prensa que, ante la "caótica situación" en Oriente Medio, China cree que es "imperativo respetar la soberanía de los países de la región", "buscar soluciones y dejar de avivar las llamas" con vistas a "poner fin a la violencia" en las zonas en conflicto, recogió la Cancillería china en su página web.
El canciller chino pidió que la cuestión palestina no quede marginada e instó a "abstenerse de acciones que conduzcan a un deterioro de la situación y a la creación de obstáculos para un alto el fuego".