El Barça, obligado a reaccionar para empatar la serie contra el Olympiacos

Con 48 horas de margen entre el primer y el segundo asalto, el conjunto azulgrana, que contará nuevamente con la plantilla al completo, deberá corregir aquellos aspectos en los que el miércoles se vio superado por el conjunto ateniense, empezando por la dureza.

El Olympiacos fue el equipo más regular sobre la pista y logró imponer el ritmo lento que le convenía durante la mayor parte del encuentro gracias a la exigencia física, en especial a una defensa tan solidaria en los cambios como expeditiva en los contactos.

Y al Barça, que solo se encontró cómodo en fases puntuales del primer y el segundo cuarto en las que pudo correr, se le atragantó el ataque estático ante la que posiblemente sea la mejor defensa de la competición a media pista, la del equipo que menos puntos por partido encajó en la temporada regular (75).

En cambio, al cuadro azulgrana le faltó contundencia atrás en la primera mitad, en la que concedió canastas fáciles y tiros libres que permitieron al Olympiacos tomar una ventaja máxima de 13 puntos. Aunque el Barça mejoró este aspecto tras el descanso, mostró carácter y dispuso de dos posesiones para empatar en el último cuarto, le faltó acierto en los minutos decisivos.

"Tendremos que mantener durante los 40 minutos la defensa de la segunda mitad y no conceder puntos fáciles, que en estos momentos penalizan mucho. En ataque hay que encontrar mejores soluciones, controlar las pérdidas, ocupar mejor los espacios y mover más la pelota", resumió el técnico Roger Grimau después del partido.

Otra de las claves será el acierto exterior. El Barça derrotó al Olympiacos en los dos partidos de la fase regular, el 13 de octubre (68-77) y el 10 de enero (86-78), con un porcentaje del 51% en triples en ambos encuentros, pero el miércoles se quedó en un 7 de 22 (31,8%).

Asimismo, el cuadro catalán necesitará una mayor aportación de varios de sus referentes. Es el caso del pívot Jan Vesely, que es el máximo anotador del equipo (12,6) y en el primer partido de la serie solo encestó tres tiros libres; y del base Tomas Satoransky, que falló su único tiro a canasta en 22 minutos en pista.

Con el escolta Darío Brizuela fuera de la rotación por decisión técnica, el base Nico Laprovittola despunta como el jugador capaz de desequilibrar la balanza por talento en el perímetro. Tras una mala noche en el tiro (9 puntos, 1 de 6 en triples), el argentino tratará de recuperar el acierto que le llevó a promediar 18,2 puntos en cinco partidos entre el 28 de marzo y el 14 de abril.