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La frustración por no haber podido evitar la promoción queda mitigada por la confianza que acumula España con este doble triunfo sobre los samoanos, que serán uno de sus rivales más peligrosos en el torneo que se disputará dentro de cuatro semanas en el Civitas Metropolitano de Madrid.
España cerró la fase de grupos con un paseo militar ante los samoanos, arrollados por la potencia de los delanteros Manu Moreno, que absorbió a dos defensores antes de servirle en bandeja el primer ensayo a Paco Cosculluela, y Enrique Bolinches, autor de la segunda marca tras tumbar a Sepulona Faoa con una percusión colosal.
Daniel Patelesio acortó distancia para los oceánicos, pero la exclusión temporal a Pisi Leilua por un placaje al cuello sobre Alejandro Laforga permitió que España estirase su renta (28-5) antes del descanso con marcas de Josep Serres, hábilmente asistido por Juan Martínez, y Tobías Sainz-Trápaga.
Sainz-Trápaga fue el gran protagonista de un partido que saldó con un triplete al término de una segunda en la que Samoa, impotente, se estrelló contra la defensa española y el pilar madrileño fue el encargó de disparar el tanteo hasta el 40-5 definitivo.
En la semifinal del trofeo de consolación, cuatro horas más tarde, Pol Pla abrió el marcador al interceptar con el pie una mala transmisión entre la pareja de medios samoana y el propio ala catalán puso el 14-0 al descanso al culminar junto al banderín una larga acción de ataque de su equipo.
Una incursión de Sainz-Trápaga, con descarga interior, permitió a Asier Pérez anotar el tercer ensayo de España, que se clasificó para el encuentro del domingo contra Fiyi pese a un minuto final angustioso tras las marcas que plantaron los samoanos Patelesio y Enosa Afemai (19-12).