Igualdad que frena a los dos

Fue un dominio alternado

Cada conjunto tuvo un tiempo a favor. Luqueño empezó mejor, sin embargo, como en el cotejo ante Cerro Porteño, en la etapa final se quedaron “sin piernas”. 

Los primeros 10 minutos Luqueño ejerció dominio sobre los locales. El mejor fútbol de la visita empezó en la zona de gestación; en ese sector los auriazules tuvieron jugadores de mejor pie. El toque sutil de Dos Santos y compañía superó a los “metedores” volantes de “General”, que al comienzo no encontraron el balón. Lentamente los locales emparejaron las acciones y a partir de la mitad de la etapa, los “militares” también se acercaron con peligro hacia la valla luqueña. El encuentro entró en una etapa de ataque por ataque, aunque las llegadas de la visita siempre fueron más punzantes. 

A los 40 minutos, los auriazules abrieron el marcador, a través de un golazo del juvenil Víctor Villalba. El gol tuvo su origen en un dudoso córner para la visita, encontrando el autor del tanto el balón, de un rebote, cerca del área grande, sacando un balonazo colocado por elevación que superó totalmente al arquero Escobar. Fue un hermoso tanto por la calidad en la ejecución.

En tiempo de adición, los locales encontraron el empate casi de casualidad. Mano de Miguel Godoy dentro del área que Blas Díaz lo cambió por gol, terminando la primera etapa con el empate de 1-1. Duro golpe para la visita que hizo mejor los deberes en el primer acto.

En la complementaria, el “Sportivo” se quedó peligrosamente y “General” se fue arriba y tuvo tres ocasiones claras para pasar al frente en el marcador. Aunque el empate le queda bien al partido, por lo expuesto en la primera etapa por la visita y el repunte en la segunda, de los “militares”.