La senadora Desirée Masi (PDP) dijo que la conducta de Cubas era inadecuada, pero debía ser analizada en otra instancia, que podía ser la judicial.
Destacó que quienes sí usaron sus influencias fueron los representantes de los sojeros y ganaderos, que se reunieron con el presidente Blas Llano a pedir la expulsión de Cubas. Consideró grave que un grupo de presión saque a un senador. En tanto, Salyn Buzarquis (PLRA) dijo que la medida del Senado no tenía valor legal y que Cubas debía seguir en su bancada.