09 de abril de 2020 - 02:00

Silencio de los irreductibles en Tañarandy

2015. El altar de maíz y calabazas inspiró luego al altar que se erigió en el predio de la Fuerza Aérea Paraguaya con motivo de la visita del Papa Francisco en el mes de julio. En esta foto, aparece La Dolorosa.

2016. Procesión de La Dolorosa al encuentro del Cristo, uno de los momentos más esperados de la festividad.

2018. La Barraca también homenajeó a Chiquitunga, la primera mujer beata de nuestro país. Aquí una recreación del llamado que sintió de adolescente.

2017. La pasarela flotante que cruzaba el lago artificial fue uno de los atractivos.

No importan el barro, la lluvia o el buen tiempo, Tañarandy congrega a cientos de personas año a año.

Pasaje bíblico viviente sobre la laguna artificial de La Barraca, una puesta en la que Koki Ruiz y su hija Macarena trabajan en conjunto con la comunidad y voluntarios de otras partes del país.

Las dolientes portando los candiles en el islote de La Barraca durante la presentación realizada en el año 2014.

La pasarela de la fe. Erigida tres años atrás, fue una de las puestas más memorables por donde se realizó la procesión de La Dolorosa.

La Última Cena flanqueada por San Roque González (der.) y La Dolorosa (izq.) en 2016, reciclados del año anterior, cuando vino el papa Francisco.

Año 2015. Gran participación de visitantes quienes portaron candiles y llegaron hasta el islote.

Esta debió haber sido la edición Nº 28 de la procesión de fuego y fe en la compañía de Tañarandy, San Ignacio, Misiones (unos 250 km al sur de Asunción), de la mano del artista Koki Ruiz. El covid-19 también impuso sus reglas de seguridad sanitaria a uno de los eventos de referencia de la Semana Santa. Aquí, un recorrido según pasaron los años de esta festividad.

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Con las luminarias de papel de seda y de apepu como elementos transversales, Tañarandy es, fue y será uno de los lugares de referencia en Semana Santa. Este año, debido a las restricciones impuestas para evitar la propagación del virus covid-19 las llamas se apagarán en La Barraca o al menos no tendrá el bullicio y la masiva concurrencia que la caracteriza todos los Viernes Santo desde el año 1992.

Cada año Koki Ruiz y su hija Macarena sorprenden con una temática diferente.

La procesión de La Dolorosa, homenajes a Chiquitunga, la primera mujer beata paraguaya, San Roque González, así como cuadros vivientes de la Última Cena pueden apreciarse a la luz de antorchas y candiles.

Mañana no habrá procesión en Tañarandy y nos privaremos de participar de esta que es también propuesta artística digna de apreciar. El 2021 tal vez tendremos mejor suerte y veamos nuevas obras de arte desde Misiones. (Texto y fotos: Marta Escurra).