Cerca de las 19:00 hora local (23:00 GMT) se inició el concierto al que asistieron unas 19.000 personas, según estimaciones de los organizadores, que fueron recibidas por los beats y las mezclas, acompañadas de un despliegue de luces en un imponente escenario con efectos especiales.
Al aire libre, en un amplio espacio verde en el que dispusieron distintas ofertas gastronómicas y otros servicios, los asistentes bailaron y corearon las piezas nacionales e internacionales que ofreció el festival.
Se presentaron también el dj colombiano Martin Trevy y los venezolanos Anibal Hamilton, Víctor Porfidio y Tony Guerra, quienes animaron al publico por más de cuatro horas, hasta la presentación de los invitados principales.
Los asistentes, muchos usando disfraces y maquillajes excéntricos, disfrutaron de los artistas que se presentaron en un escenario de 50 metros de profundidad y una altura de 24 metros, además de un montaje que incluyó más de 350 lámparas móviles y 1.600 metros cuadrados de pantallas led.
Aunque para el público, los organizadores del evento cumplieron su promesa de transmitir "buena vibra, fantasía y colorido", en redes sociales varios caraqueños se quejaron de elevado volumen de la música y el "casos" vial que generó el festival en los alrededores.