"Hubo un ataque con disparos contra civiles y soldados del Ejército israelí en el área de Nablus", informó un portavoz militar en un comunicado.
Los militares fueron atacados junto a un grupo de colonos entre los que estaba Yosi Dagan, jefe del Consejo Regional de Samaria, órgano encargado de la gestión de asentamientos judíos de la zona.
No hubo heridos entre los colonos, mientras que un soldado israelí "resultó levemente herido y fue evacuado al hospital para recibir atención médica", concretó el Ejército.
Durante el ataque, las tropas respondieron disparado fuego real y ahora patrullan el área en busca de los sospechosos.
Este es el segundo incidente de esta índole en el área, después de que esta mañana un hombre padeciera heridas leves por metralla durante un tiroteo contra un autobús y un taxi israelíes que se dirigían hacia la colonia judía de Itamar, cercana a Nablus.
Esta serie de incidentes se producen en un contexto de creciente tensión en la zona, marcado por incesantes redadas israelíes en Cisjordania y un aumento de ataques de palestinos contra objetivos militares o colonos israelíes durante las últimas semanas.
Las operaciones de arresto israelíes comenzaron hace seis meses, desencadenadas por una serie de ataques cometidos por palestinos o árabes-israelíes en los que murieron 18 personas.
Estas redadas, y los enfrentamientos con milicianos palestinos que suelen producirse como resultado, han dejado ya casi un centenar de palestinos muertos y más de 2.000 arrestos en apenas medio año.
En lo que va de 2022 se han registrado más de 470 ataques por parte de colonos contra palestinos en Cisjordania, con casi cien heridos palestinos, según datos de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA). Esta cifra alcanza casi el número de ataques del conjunto de 2021, cuando hubo casi 500 agresiones por parte de colonos.
Asimismo, durante este 2022 hubo seis palestinos que murieron "en incidentes relacionados con colonos", según OCHA.
El pasado miércoles, cuatro palestinos murieron durante una redada israelí en el campo de refugiados de Yenín, también en el norte de Cisjordania, desencadenando choques entre palestinos y tropas israelíes en el que fue el día más violento del año en la zona.
El Ejército israelí ha duplicado sus efectivos en Cisjordania para mejorar la vigilancia ante lo que califican como una "nueva ola de terrorismo", mientras que jóvenes palestinos armados, algunos de los cuales actúan de forma independiente y no vinculados a las milicias tradicionales, defienden la resistencia armada como la única salida a la ocupación.
Israel tomó control de Cisjordania y Jerusalén Este en la Guerra de los Seis Días de 1967 y mantiene desde entonces una de las ocupaciones militares más largas de la historia reciente.