Kristersson había asegurado el miércoles, cuando finalizaba el segundo plazo de dos semanas para negociar con el resto de partidos del bloque opositor, que solo faltaban cerrar algunos detalles y que necesitaba un par de días más, petición concedida por Norlén.
Si el plan va según lo previsto, Norlén podría anunciar hoy que Kristersson se someterá este lunes a una votación en el Riskdagen (Parlamento) para ser elegido primer ministro.
Aunque Kristersson dio por hecho el pacto con las otras tres fuerzas del bloque opositor, no especificó qué detalles faltaban por resolver ni la composición de un hipotético gobierno tras el triunfo en las elecciones legislativas del pasado 11 de septiembre.
Kristersson recibió el pasado día 19 el encargo oficial de dirigir las negociaciones después de que Norlén se entrevistase con todos los líderes políticos y una mayoría le diese su respaldo.
El Partido Moderado (conservador) de Kristersson fue el tercero más votado, con el 19,1 %, detrás de los socialdemócratas de la primera ministra, Magdalena Andersson (30,3 %), y del ultraderechista Demócratas de Suecia (SD), que obtuvo el 20,5 %.
El SD, con raíces neonazis en su fundación a finales de la década de 1980, fue sometido a un "cordón sanitario" por el resto de fuerzas desde su entrada en el Parlamento en 2010, lo que explica que los socialdemócratas hayan gobernado en minoría las dos pasadas legislaturas pese a que en la Cámara había mayoría de centroderecha.
Conservadores, cristianodemócratas y liberales se abrieron sin embargo el último año a romper ese aislamiento y pactar con el SD, pero rechazan inicialmente su entrada en un ejecutivo, una exigencia que la ultraderecha parece aceptar a cambio de influencia política.