"El Ejército estaba llevando a cabo ayer su patrulla rutinaria en la zona cuando, alrededor de las 19.00 hora local (18.00 GMT), fue atacado", dijo a EFE por teléfono el comandante en jefe de las operaciones en la provincia, coronel Adam Bakhit.
"Los asaltantes fueron neutralizados después de treinta minutos de combates, que se saldaron con la muerte de cuatro de nuestros hombres y 17 terroristas", añadió.
El ataque, que tuvo lugar contra la localidad de Ngouboua, se enmarca, según la población local, en un reciente recrudecimiento de la violencia en la zona.
"Desde hace algunos meses, no pasa una semana sin que sepamos de un ataque con explosivos en algún pueblo. Ya no podemos salir al campo", aseguró a EFE Alladjaba Djamal, un líder social del pueblo afectado.
Desde hace años, el lago Chad, una superficie de más de 25.000 kilómetros cuadrados de zona pantanosa, agua y decenas de islas que comparten Nigeria, Níger, Camerún y Chad, se presta como refugio ideal para el grupo yihadista nigeriano Boko Haram y su escisión, el Estado Islámico en la provincia de África Occidental (ISWAP).
Ambos grupos buscan imponer un Estado de corte islámico en Nigeria, país de mayoría musulmana en el norte y predominantemente cristiano en el sur.
El recrudecimiento de los atentados terroristas en la zona de Chad dificulta el comercio, la agricultura y la pesca en esa área.
Boko Haram y el ISWAP han matado a más de 35.000 personas y han causado unos 2,7 millones de desplazados internos, sobre todo en Nigeria, pero también en países vecinos como Camerún, Chad y Níger, según datos gubernamentales y de la ONU.