El mandatario brasileño le transmitió a Abás, quien pertenece a una formación política rival de Hamás, su apoyo a un corredor humanitario y dijo que "los inocentes en Gaza no pueden pagar el precio de la locura de aquellos que quieren la guerra", según un comunicado del Gobierno.
Además, Lula expresó su "disposición" para ayudar en la búsqueda de la paz, que pasa por una "solución política", y recordó el reconocimiento de Brasil al Estado palestino.
Por otro lado, el mandatario condenó los "ataques terroristas" lanzados por Hamás contra civiles en Israel y que se cobraron la vida de tres brasileños, sin que el comunicado difundido por el Gobierno mencione por nombre a la formación islamista.
Lula se expresó de manera muy parecida en su conversación el jueves con el presidente de Israel, Isaac Herzog, a quien el brasileño pidió que se permita la entrada de ayuda humanitaria en el territorio palestino, una petición a la que hasta ahora se ha resistido el Estado judío.
El Gobierno de Brasil evacuó este sábado a 215 de sus ciudadanos desde Israel, lo que eleva a 916 el número de brasileños repatriados desde que estalló el conflicto que ha dejado ya más de 2.200 palestinos y 1.400 israelíes muertos.
Además, en vísperas de una probable ofensiva del Ejército israelí, hay 28 brasileños atrapados en Gaza a los que el Ejecutivo está intentando sacar a través de la frontera con Egipto.